Cuatro jóvenes de entre 18 y 20 años están siendo investigados por delitos contra la seguridad vial tras ser captados por cámaras de seguridad participando en una carrera ilegal en los túneles de la N-120, que conectan Ourense con la provincia de León.
El incidente ocurrió en la madrugada del 16 de noviembre en el término municipal de Rubiá, cuando dos vehículos colisionaron, dejando cinco personas heridas. Los ocupantes de los coches afirmaron que el accidente había sido causado por un jabalí que irrumpió en la carretera. Según su versión, uno de los conductores perdió el control del coche al intentar esquivar al animal, quedando el vehículo en medio de la calzada, lo que provocó que el otro automóvil se saliera de la vía, cayendo por un desnivel e impactando contra un árbol.
Sin embargo, las pruebas recopiladas por la Guardia Civil de Tráfico contradicen esta versión. Al analizar las grabaciones de las cámaras de seguridad de los túneles, se descubrió que cuatro vehículos, incluidos los dos implicados en el accidente, realizaron maniobras temerarias en la N-120 esa madrugada. Entre estas maniobras, se observó que los coches ocuparon ambos sentidos de circulación, realizaron adelantamientos peligrosos en curvas y tramos de visibilidad reducida, y dos de ellos iniciaron una carrera a gran velocidad, uno circulando incluso en sentido contrario.
Uno de los vehículos llevaba un menor de edad como acompañante. Las investigaciones han concluido que tres de los conductores están imputados por un delito de conducción temeraria, enfrentándose a posibles penas de prisión de dos a cinco años, multas de 12 a 24 meses y la retirada del carné de conducir por un periodo de entre seis y diez años. Además, dos de ellos están siendo investigados por un delito de estafa en grado de tentativa, al intentar justificar el accidente con una versión falsa para reclamar al seguro.
El cuarto conductor, aunque no está siendo investigado penalmente, ha sido sancionado con una multa de 500 euros y la pérdida de seis puntos del carné por conducción temeraria.
Según la Guardia Civil, los implicados ya eran conocidos en la comarca de Valdeorras por su conducción imprudente a altas velocidades en localidades como O Barco, A Rúa y A Pobra de Trives. “Afortunadamente, los sistemas de seguridad de los vehículos evitaron un desenlace trágico. De no ser así, estaríamos lamentando un accidente con seis víctimas mortales”, concluyó la Guardia Civil.