El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, ha denunciado lo que considera un «bloqueo institucional» por parte de la Xunta hacia la ciudad y sus iniciativas, llegando a comparar esta situación con «un embargo similar al que sufrió la Cuba de Fidel Castro». Según el regidor, este supuesto bloqueo responde a intereses electoralistas que perjudican directamente a los ciudadanos de Ourense.
«Nos están sometiendo a un embargo porque nos ven como un rival político, y los damnificados son los ourensanos», afirmó Jácome, quien acusó al Gobierno gallego de no llevar a cabo inversiones cruciales ni aceptar reuniones solicitadas por el Ayuntamiento. Según el alcalde, esta falta de diálogo representa «un desprecio absoluto» hacia la ciudad, criticando especialmente al presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, por no haber atendido las múltiples peticiones de reunión enviadas desde hace un año.
Jácome también detalló que, tras ser solicitada una agenda para una eventual reunión, la Xunta no dio respuesta en el plazo de un mes. Esta actitud, según el regidor, ha frenado proyectos esenciales para la ciudad, como la plantación de más de 10.000 árboles, la construcción de un parque acuático termal, la reparación de calles de titularidad autonómica, y la creación de un nuevo edificio administrativo de la Xunta. Otros proyectos paralizados incluyen la mejora de infraestructuras deportivas, la ejecución del trazado de la circunvalación sur y el soterramiento de la Avenida Otero Pedrayo.
«Toda esta legislatura ha sido una oportunidad perdida para Ourense. La Xunta actúa de forma cutre y rácana, lo cual es un insulto y una discriminación hacia nuestra ciudad», denunció Jácome. Asimismo, lamentó que el Gobierno autonómico lleve a cabo proyectos no solicitados por el Ayuntamiento ni por los ciudadanos, ejecutándolos «de espaldas al gobierno local».
Críticas del BNG a Jácome
Tras las declaraciones del alcalde, el Bloque Nacionalista Galego (BNG) criticó su postura, recordando que hace un año Jácome se abstuvo en la investidura de Alfonso Rueda, facilitando la continuidad del PP en la Xunta. Según el BNG, el alcalde carece de credibilidad y practica un «victimismo ficticio».
El portavoz local del BNG, Luís Seara, señaló que las situaciones que ahora denuncia Jácome «no son nuevas» y ya se producían durante el mandato de Alberto Núñez Feijóo. Además, preguntó por la postura del gobierno local frente a proyectos cuestionados previamente por el BNG, como las obras en Marcelo Macías, el soterramiento de la avenida Otero Pedrayo o la nueva estación de autobuses.
El BNG también aprovechó para criticar la falta de peso político del alcalde en su relación con otras instituciones. Sin embargo, reprochó a la Xunta su actitud hacia Ourense, calificándola de «desprecio absoluto» hacia la ciudadanía. «Aunque no compartimos la gestión de Jácome, entendemos que como alcalde de Ourense merece el trato institucional adecuado», concluyó Seara.