Un vecino de A Guarda de 56 años y con antecedentes policiales, está siendo investigado por la Guardia Civil por un presunto delito de abandono animal, tras dejar desamparados a cinco cachorros en un aparcamiento.
Los hechos ocurrieron el pasado febrero, cuando un residente de la zona escuchó los llantos de los perros en un descampado cercano. Tras encontrarlos solos y desprotegidos, decidió llevarlos a su casa para resguardarlos. A la mañana siguiente, los trasladó a una clínica veterinaria para que recibieran atención.
Las investigaciones llevadas a cabo por el Equipo del Seprona de la Guardia Civil de Tui permitieron identificar al propietario de los animales. Al ser interrogado, el hombre reconoció haberlos abandonado en el lugar, bajo la creencia de que algún vecino se haría cargo de ellos.
Ante esta confesión, la Guardia Civil ha procedido a investigarlo como presunto responsable de un delito de abandono animal. Ahora se enfrenta a una multa de 10.000 a 50.000 euros por esta infracción, que vulnera la Ley de Bienestar Animal de 2023.
