Los nuevos descuentos en los peajes de la autopista AP-53, que conecta Santiago de Compostela con Lalín, han entrado oficialmente en vigor este jueves, tras la aprobación del decreto correspondiente en el Consejo de Ministros del pasado martes. Esta medida supone una reducción significativa en los costes de uso para conductores habituales y transportistas, en línea con las bonificaciones ya aplicadas en otras autopistas como la AP-9.
Bonificaciones para vehículos ligeros
Para turismos y otros vehículos ligeros, siempre que utilicen el sistema de telepeaje, los trayectos de regreso serán gratuitos si se realizan dentro de un plazo máximo de 24 horas desde el trayecto de ida y en la misma dirección. Este descuento del 100% en la vuelta estará vigente todos los días, incluidos festivos.
Además, quienes realicen al menos 20 desplazamientos mensuales en la autopista podrán beneficiarse de una bonificación adicional del 50% sobre todos los trayectos. A efectos de cómputo, se considera un solo desplazamiento cada viaje en la misma dirección realizado en un día.
Esto permitirá que usuarios recurrentes pasen de pagar unos 280 euros al mes a solo 70, según las estimaciones del PSdeG. En términos de ahorro, se traduce en hasta 315 euros mensuales menos para quienes usen la vía diariamente.
Descuentos fijos para vehículos pesados
Por su parte, los camiones —tanto de tipo 1 como de tipo 2— disfrutarán de un descuento fijo del 50% en todos los trayectos, independientemente de la forma de pago o de la frecuencia de uso. No será necesario el uso de telepeaje ni acreditar un número mínimo de viajes mensuales.
Esta bonificación, que se aplicará de forma automática en el momento del pago, puede representar un ahorro de hasta 420 euros al mes para camiones de cuatro ejes, según detalló el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente.
Una inversión a largo plazo
El Gobierno ha asegurado que la medida estará financiada hasta el final de la concesión de la AP-53, prevista para noviembre de 2074. En total, se ha previsto una dotación económica de 885 millones de euros, con 14,3 millones presupuestados solo para los años 2025, 2026 y 2027.
Estas bonificaciones tienen como objetivo incentivar el uso de la autopista frente a vías alternativas como la N-525, que presenta un trazado más complejo y una mayor siniestralidad.
Reacciones políticas
El anuncio ha generado reacciones en todos los frentes políticos gallegos. El PSdeG, por medio de su secretario xeral José Ramón Gómez Besteiro, celebró la entrada en vigor de los descuentos como una victoria de los socialistas gallegos: “Es un verdadero alivio para las familias, los trabajadores y quienes más lo necesitan. Gracias a esta medida, la AP-53 deja de ser una injusticia”.
Desde el BNG, su portavoz nacional Ana Pontón calificó los descuentos como un ejemplo de “política útil” y subrayó que se corrige “un agravio” al ser la única autopista gallega sin bonificaciones hasta ahora. Además, defendió que el Bloque “sí defiende los intereses de Galicia en Madrid”.
En cambio, desde la Xunta, fuentes de la Consellería de Vivenda e Infraestruturas recordaron que circular por las autopistas autonómicas sigue siendo “más barato” que hacerlo por la AP-9 o la AP-53, incluso con las nuevas bonificaciones aplicadas.