La primera torre de control digital de España se implantará en Vigo y lo hará, previsiblemente, el próximo martes 17 de junio. Lo hace después de varias demoras, pues estaba previsto que comenzara a funcionar el pasado 11 de junio.
Una torre que no está exenta de polémica, pues tanto BNG como el Partido Popular se oponen a este proyecto. Desde las filas nacionalistas, Néstor Rego advierte del «riesgo» que podría suponer la instalación de una infraestructura como esta, pues centralizaría el control de los aeropuertos de la comunidad, lo que en palabras del Diputado implicaría una reducción «significativa» del campo visual de control.
Rego apela a la seguridad pero también a la situación de los empleados, pues asegura que este cambio traería consigo un «deterioro de las condiciones laborales del personal». El diputado ha señalado que «no se puede permitir que el afán de reducción de costes de AENA degrade los servicios públicos aeroportuarios en Galicia». Una reducción que «también implicaría un incremento de la carga de trabajo y riesgo para la seguridad aérea».
Otro partido que se opone a esta torre de control digital es el Partido Popular. Ellos pidieron ya en el mes de abril la paralización «inmediata» de este proyecto, pues aseguran que este nuevo sistema de videovigilancia les suscita «dudas» después de ver el «precedente fallido» de Menorca.
El grupo parlamentario del Partido Popular llevó al Congreso de los Diputados una proposición no de ley con la que debatir en la comisión de Transportes y Movilidad Sostenible sobre la paralización de este proyecto puesto en marcha en Peinador.
Desde Aena aseguran que la torre viguesa mantendrá «las mismas condiciones de seguridad que una torre de control convencional». También afirman que la implantación de este método se realizará de forma «paulatina», pues este sistema en remoto comenzará siendo utilizado dos horas al día con el servicio duplicado en la torre convencional de control.