Un estudio de la Fundación Línea Directa manifiesta que durante la última década fallecieron más de 200 motoristas en vías gallegas. Este análisis se basa en los datos recabados entre los años 2014 y 2023 y sitúa a Galicia como una de las comunidades autónomas en las que más se experimentan accidentes mortales con motos y ciclomotores.
Durante este período de tiempo fueron 205 las personas que perdieron la vida en estas circunstancias y 8.405 los motoristas que sufrieron lesiones, de los que más de 1.500 tuvieron que ser atendidos por los servicios hospitalarios pertinentes.
En líneas generales, durante esta década en España fallecieron más de 4.000 motoristas y los accidentes mortales en los que alguna motocicleta se vio implicada crecieron un 74%.
La mayoría de estos siniestros, cada vez más habituales, se debe en el 29% de los casos a ir por encima de la velocidad permitida, en el 12% a que el motorista no utilizaba casco y en el 8% a que el conductor circulaba sin un permiso en vigor. Además, en 2023, más de la mitad de los motoristas fallecidos (53%) dieron positivo en alcohol, drogas o psicofármacos.
En cuanto al perfil del motorista, se trata de un hombre de mediana edad, de entre 40 y 50 años, que conduce una motocicleta y fallece por una salida de vía en una carretera interurbana, en fin de semana y en el mes de julio.