La Policía Nacional investiga la muerte del ferrolano José María Ares, conocido por su nombre artístico como DJ JM Ares, que falleció la pasada madrugada del domingo tras recibir un disparo en el cuello. El fallecido estaba poniendo la música a una celebración en un chalet de lujo de la urbanización Guadalmina, cuando recibió el impacto mortal del proyectil. Fue hallado tiempo después por la Policía Nacional en el domicilio, solo, sin que hubiera allí ninguno de los participantes de la celebración.
Este ferrolano llegó a Sevilla hace más de 15 años y actualmente residía en la localidad sevillana de El Cuervo, cerca de Cádiz. Allí también se trasladaron desde Ferrol su hermano y posteriormente su madre. Chema, como era conocido por sus amigos, se había convertido en uno de los DJ de referencia en el sur de España y, de hecho, era el DJ oficial de El Cortijo, una de las discotecas más conocidas de Vejer de la Frontera, en Cadiz.
Las primeras hipótesis sobre su muerte apuntan a que el disparo pudo tratarse de una bala perdida, que salió de una habitación contigua en la que hubo una discusión que acabó en tiroteo. Para esclarecer esos términos la Brigada de la Policía Científica está haciendo una evaluación del escenario y de las trayectorias de las balas.
No se sabe la hora exacta a la que se produjo el suceso. La fiesta discurrió por la tarde-noche del domingo, pero la Policía Nacional no tuvo conocimiento de lo ocurrido hasta la media noche, tiempo después de producirse la muerte. Fue un aviso nocturno el que dio la pista. Por eso los agentes supieron que podía haber una persona muerta en un chalet de Guadalmina durante una fiesta ilegal.
Una patrulla se acercó el lunes al chalet que les habían dicho, pero en el lugar no había nadie, tan solo indicios de que allí se hubiera celebrado una fiesta y tirado en el suelo el cadáver del joven ferrolano. La confirmación de que había un cuerpo en esta vivienda llegó a la comisaría pasada la una de la madrugada del lunes.
En ese momento se desplegó el dispositivo para el levantamiento del cadáver y la investigación de los hechos. Una de las primeras pesquisas de los agentes es localizar a las personas que estaban en esa fiesta y que pudieran aportar algún testimonio que les lleve a esclarecer lo que sucedió. Hasta el momento, no hay detenidos.