La Sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña acogerá en la mañana de este martes, 1 de febrero, el juicio contras seis personas, todas ellas con lazos familiares, que conviven en el asentamiento de A Vacariza, en las proximidades del polígono de Río do Pozo, en Narón. Están acusados de tráfico de drogas y de atentado a la autoridad, tras agredir a algunos de los agentes de la Policía Nacional encargados de realizar una redada en febrero del año pasado.
Se da por probado, tras el registro policial, que el asentamiento del ‘Moracho’, en el lugar de contaba con una «oficina» y «cajón dispensador» para entregar la droga y recibir el dinero, en una bodega situada en el recinto en donde se levantan varias viviendas unifamiliares. Además, las sustancias estupefacientes se escondían en dicha bodega, que tenía disimulado detrás de un enchufe un zulo para esconder también el dinero y una estufa de leña para arrojar la droga en caso de que se produjera alguna intervención.
La actividad criminal llevada a cabo por los encausados concluyó con su detención por efectivos del Cuerpo Nacional de Policía el día 10 de febrero de 2021, sobre las 10:30 horas, y con la incautación de 1.600 dosis de cocaína, 400 dosis de heroína, sustancias de corte y otras sustancias psicoactivas, 24.500 euros en metálico, cinco vehículos de alta gama asociados a los detenidos, un arma corta de fogueo y cartuchos de munición de 9 mm.
El día en que se llevó a cabo la entrada y registro uno de los encausados intentó cerrar el portal de acceso para impedir la entrada la entrada de los agentes y comenzó a gritar «que viene la policía, tirar todo». Según recoge el escrito de acusación, los agentes echaron a correr hacia la vivienda, encontrándose en la puerta con los otros tres acusados que se abalanzaron sobre ellos para impedirles el acceso a la vivienda, iniciándose un forcejeo. Fruto de esta pelea varios agentes resultaron heridos y alguno requirió tratamiento quirúrgico.
Por todo ello, la Fiscalía solicita para los acusados penas de prisión que van desde los cinco y siete años, además de multas que llegan en el caso de algunos de los acusados a los 40.000 euros.
Investigación
El operativo se desarrolló después de que los agentes constataran que numerosos drogodependientes acudían al asentamiento para proveerse de sustancias estupefacientes, incluso en varias ocasiones en el mismo día. De este modo, comprobaron que los integrantes de esta organización realizaban distintas labores, desde la seguridad en el asentamiento en prevención de posibles operativos policiales, hasta la atención a los clientes o las propias ventas.
Para estas ventas disponían incluso de casetas adaptadas con separación cliente-vendedor, realizaban la transacción a través de un cajón realizado al efecto que maximizaba las medidas de seguridad, disponiendo también dicho anexo de una chimenea para deshacerse rápidamente de las sustancias caso de acción policial.