Continúan en Valdoviño los trabajos enmarcados en el plan municipal de eficiencia energética. En este caso se trata del relevo de elementos de la iluminación pública tradicional en vías de la parroquia de Vilaboa por iluminación LED, de bajo consumo. Además, se probará el funcionamiento de farolas LED alimentadas con paneles solares en otros espacios públicos del municipio alejados del tendido de red.
En un contexto de precios máximos de la electricidad, la administración local destina la subvención procedente del denominado Fondo de Compensación Ambiental a reducir su factura eléctrica. Y así, invertirá parte de los 12.000 euros concedidos a cambiar luminarias clásicas de vapor de sodio por otras de tecnología led de 30 watios. La firma Proymel montajes ya empezó a colocarlas en la recta de la cooperativa de Vilaboa y está previsto sustituir un total de 23 puntos de luz en la zona.
Aunque si por algo resulta innovador el proyecto municipal es por introducir soluciones de iluminación exterior con energía solar. Así, con cargo a esa pequeña partida del Fondo Ambiental se suministrará también de una docena de lámparas LED solares, que se autoabastecen de la luz que recogen por el día y que transforman, sin tener que depender de la red eléctrica.
Estas farolas, de consumo eléctrico nulo y cero emisiones de CO2, se utilizarán, como explicó el edil de Servicios, Benito Veiga, para dotar de iluminación exterior a lugares concretos de varias parroquias a los que el tendido eléctrico no llega, o es «dificultoso y costoso» su traslado. Añadió que las lámparas contarán con un sensor de luz crepuscular que, en función de la luz ambiente que haya en cada momento, mantendrá apagada o encendida la luminaria.
De este modo, Valdoviño redobla su apuesta por la eficiencia energética, que se tradujo en los últimos años por la paulatina utilización de LEDs en la iluminación de carreteras y entorno de edificios público, incorporando ahora soluciones aún más ecológicas y también más económicas.