Cerca de 500 vecinos participaron este domingo en la Festa dos Maiores del Concello de Brión, una de las celebraciones más antiguas de la provincia, que volvió tras dos años de parón obligado debido a las restricciones sanitarias derivadas de la pandemia.
El alcalde de Brión, Pablo Lago Sanmartín, fue el encargado de darles la bienvenida a los mayores tras la tradicional misa que tuvo lugar en el patio del IES Brión, a cubierto de la lluvia intermitente de la jornada.
Tras picar un poco de bica y echar unas bailas al ritmo de un grupo de gaiteros y de la artista local Ruth Cundíns, los mayores se desplazaron unos metros hasta el polideportivo municipal de Pedrouzos, donde tuvo lugar la comida de fraternidad. El menú, de la Pulpería Potel, incluyó empanada, pulpo, carne ao caldeiro y queso con membrillo.
