El Concello de Cedeira solicitará a la Xunta de Galicia un nuevo acuerdo de colaboración para continuar los trabajos de excavación en el castro del Sarridal. El alcalde de Cedeira, Pablo Moreda, la concejala de Turismo, Carmela Prieto, y la edil del BNG María Xosé Rodríguez, mantuvieron en días pasados una reunión con la directora general de Patrimonio, María del Carmen Martínez Insua, para presentarle los resultados de la reciente campaña de excavación financiada por el Ayuntamiento. El objetivo es que la administración autonómica financie con 14.500 euros la campaña que, durante 22 días en este mes de septiembre, servirá para limpiar, consolidar y proteger las estructuras descubiertas en la reciente intervención.
La reunión sirvió también para abordar la posibilidad de que Patrimonio colabore con el Ayuntamiento en el levantamiento de la pista que bordea la zona excavada, y que conduce al Castelo de la Concepción, y en la construcción del puente de madera que la sustituiría. El arqueólogo Emilio Ramil explicó que conocer lo que hay en esta zona ayudaría mucho a aclarar la evolución histórica del castro.
“Sabemos que estuvo habitado durante casi mil años, desde los siglos III o IV antes de Cristo hasta el IV o V después de Cristo, con dos etapas diferenciadas, la castreña y a galaico-romana”, comentó el arqueólogo. El camino actual oculta los restos del adoquinado original de la época castreña y también lo que se construyó en la etapa galaico-romana sobre el hoyo castreño, por lo que su levantamiento “serviría para tener una idea completa del que fue el asentamiento”, explicó. La intención del Ayuntamiento es preparar un proyecto para realizar esta intervención, sobre la que se construiría un puente de madera para permitir el paso, como en la actualidad, al tiempo que se descubre esta área del yacimiento.
La excavación que costeó el Ayuntamiento de Cedeira y que se desarrolló en el mes de agosto se dirigió a ampliar la superficie recuperada de las estructuras defensivas del castro Sarridal. Así, los trabajos sirvieron para avanzar en la recuperación de la cimentación del torreón defensivo y levantar otros cinco metros de restos del paramento exterior, hacia el acantilado. También se excavó el hoyo, dejando a la vista las paredes laterales y su fondo.