Los vestigios encontrados este fin de semana en Ferrol Vello durante las obras de reurbanización de la calle San Francisco podrían ser «el mayor descubrimiento en la ciudad en siglos», según explicó el propio alcalde de Ferrol, Ángel Mato, esta mañana. Según las primeras pesquisas, realizadas por técnicos de urbanismo y un equipo de arqueólogos, podría tratarse de los restos del antiguo puerto ferrolano datado en la baja edad media o incluso más antiguos. «Por el momento las conclusiones son muy preliminares, pero ya estamos elaborando un protocolo de actuación para seguir excavando y realizar un auténtico trabajo arqueológico», dijo el alcalde. Los técnicos ya trabajan en el documento que tendrán que enviar a la Dirección Xeral de Patrimonio, dependiente de la Xunta de Galicia, que es el organismo competente en esta materia.
Por el momento, con un porcentaje escaso de piezas a la vista, se puede entrever parte de una muralla, la más antigua, a unos dos metros de profundidad, construida con piezas de pizarra. Junto a ella también se aprecia un pavimento de losetas, una especie de camino, que da este trozo de muro. En concreto, la infraestructura se encuentra en la intersección de la calle San Francisco con la plaza Vella y se extiende paralelamente a la acera actual hacia la zona del muelle. Según unos planos del siglo XVII —diseñados durante la construcción del Arsenal— que forman parte del archivo documental del ayuntamiento y que se han empleado en estos primeros estudios, los vestigios coinciden con la antigua muralla y la zona portuaria del Ferrol más antiguo. De confirmarse la existencia de esta infraestructura, es probable que también aparezca una antigua rampa para embarcaciones cuya existencia se conoce a través de esos planos.
De lo que sí se tiene constancia es de que esta no es la primera vez que una obra civil se topa con estos restos antiguos. La prueba más evidente, y con la que coinciden todos los expertos que han visitado la zona, es que el alcatruz (el antiguo sistema de alcantarillado que existe en todas las calles del centro de Ferrol) no se encuentra en mitad de la vía, sino desplazo hacia un lado. «Es lógico pensar que se toparon con estos restos y decidieron evitarlos ya que su demolición hubiese sido muy costosa», explicaba esta tarde el profesor Juan Luis Montero Fenollós, director de la cátedra de Arqueología del campus de Ferrol y que colaborará con este estudio.
El alcalde confirmó esta mañana que el hallazgo cambiará por completo el calendario de la obra proyectada para la calle San Francisco, como sucede siempre que se encuentra patrimonio arquitectónico de valor. «Lo trataremos con sumo cuidado ya que podríamos estar ante una de las joyas arqueológicas de la ciudad». El gobierno local ya adelantó que su plan es no solo conservarlo, sino ponerlo en valor. «Si tenemos el visto bueno de Patrimonio, valoramos poner este espacio en valor y protegerlo para que pueda ser visitado y forme parte de la ciudad de una forma expuesta o incluso muselizada», explicó la edil de Patrimonio Histórico, Eva Martínez. Esto podría provocar un rediseño del propio trazado de la calle para «esquivar» estos vestigios.