La Guardia Civil ha detenido a un hombre, vecino de Santiago de Compostela, por un delito de violencia de género, después de que un guardia civil fuera de servicio viese cómo profería gritos amenazantes y agredía a su mujer en plena calle en Padrón (A Coruña).
Según relata el Instituto Armado, todo comenzó cuando este agente, que se encontraba en su domicilio, se despertó al oir una discusión y se asomó a la ventana. Entonces, se identificó como guardia civil y ordenó al varón que cesase en esta agresión. Aunque le pidió que permaneciese en el lugar hasta que llegase, aprovechó para marcharse de allí.
El guardia civil procedió al auxilio de la mujer hasta que se personó un efectivo de la Policía Nacional de la Comisaría de Ribeira, el cual regresaba a su domicilio tras haber prestado servicio de noche en la localidad. Ambos comprobaron que el estado de la víctima no revestía gravedad.
Mientras atendían a la mujer, observaron que el supuesto agresor se encontraba a unos 40 metros de su ubicación, por lo que se dirigieron hasta ese lugar para su detención y traslado al Puesto de la Guardia Civil de Padrón.
Una vez en las dependencias oficiales, el guardia civil activó el protocolo para este tipo de delitos. Así, se personó en el lugar el Equipo Viogén de la Guardia Civil de Noia, que se hizo cargo de las actuaciones.
Posteriormente, el guardia civil actuante, que estaba fuera de servicio, acompañó a la víctima al centro médico de Padrón para su exploración.
