El Gobierno local de Ferrol ya está trabajando en la redacción de un nuevo pliego para el servicio de desbroces mientras se licita el pliego del servicio de limpieza, donde se contemplarán estos trabajos. «Se trata de garantizar un servicio fundamental en la zona rural como son los desbroces para prevención, sobre todo en verano debido a los incendios», adelantó el concejal de Medio Ambiente, Servicios, Zona Rural y Obras, José Tomé.
Tomé López recordó que el Gobierno local tuvo que declarar la situación de emergencia del servicio de desbroces en la zona rural a la semana de entrar a gobernar, ya que no estaban previstos los trabajos de desbroces en parcelas y caminos. «En el pleno extraordinario del 13 de marzo de 2023 se aprobó hacer un convenio con la Diputación de A Coruña para los desbroces a través de la empresa Tragsa». Este convenio fue aprobado por el pleno de la Diputación el 26 de mayo y se comunicó al Ayuntamiento de Ferrol para que remitiera cierta documentación que faltaba, pero por las circunstancias que fueran, nunca se remitió a la Diputación.
Ante esta situación, el Gobierno local se vio en la obligación de declarar la emergencia y en menos de una semana resolvió este problema. Además, «se consensuó con la agrupación de AVV de la Zona Rural por dónde comenzaban estos trabajos, que se extenderán por cerca de 380 kilómetros, cumpliendo las demandas de los vecinos».
Mantenimiento de vías
También se dio cuenta de las certificaciones, desde enero hasta mayo, de la empresa encargada del servicio de mantenimiento de vías. Tomé López adelantó que se prorrogará este servicio, ya que el contrato termina el próximo mes de septiembre. Mientras tanto, «estamos trabajando en la redacción de los pliegos de un nuevo contrato de mantenimiento de vías más completo, tanto para el mantenimiento de la zona urbana como la rural».
En relación con la tala de dos árboles, uno en la calle Irmandiños y otro en la plaza de Amboage, el concejal manifestó que estos trabajos se llevaron a cabo con sendos informes técnicos que los avalaban y constataban el grave deterioro de ambas especies, que suponían un peligro para la integridad física de las personas. «Serán sustituidos por otros similares a su perímetro, fomentando la reforestación».
