El Museo de Estrella Galicia (MEGA) exhibe, en su primera exposición temporal, la primera lata de bebidas comercializada en 1935; el envase especial de la coronación de Jorge VI y la evolución de las latas de Estrella Galicia desde 1979. La muestra, que cuenta con la colaboración de la Asociación de Latas de Bebidas, pone en valor este envase como elemento “infinitamente reciclable”.
El director de MEGA, Rodrigo Burgos, y el responsable de la Asociación de Latas de Bebidas, Juan Ramón Meléndez, ha participado este martes en la inauguración de ‘Latas de cerveza. Un viaje de ida… y vuelta’, una exposición donde el visitante puede conocer la adaptación y curiosidades históricas del envase en términos de tamaño, sistema de apertura, condiciones de resistencia o impacto en el planeta.
Con esta muestra, que se puede visitar hasta el próximo 31 de agosto, el museo refuerza su compromiso con la divulgación de la cultura y la historia de la cerveza, según han remarcado.
Ubicada dentro de la única fábrica de Estrella Galicia, apuesta por el impacto positivo en el cuidado del planeta. El director de MEGA ha destacado durante la inauguración que esta exposición envía un mensaje “muy claro de sostenibilidad” y “concienciación del consumidor”.
Animar a reciclar
Por su parte, Juan Ramón Meléndez ha explicado que la lata, durante los 87 años de vida que tiene, ha tratado de adaptarse a las necesidades y ha subrayado que hoy en día lo que le pide la sociedad a “cualquier envase” es que sea sostenible. El responsable de la asociación ha señalado que la lata es “imbatible” por estar hecha “íntegramente” de aluminio, que se puede reciclar “indefinidamente sin pérdida de sus cualidades”.
Durante la primera parte, esta exposición descubre la historia de la lata de Estrella Galicia con una recopilación de su evolución desde el primer ejemplar, producido en 1979. En la segunda parte, pone el foco en el presente y futuro de este envase sostenible.
Meléndez ha destacado también que uno de los mensajes de la muestra es “animar al ciudadano a separar sus envases para reciclarlos” y ha añadido que en el caso de la lata es una proceso “muy rápido”. “En apenas 60 días ese aluminio vuelve a tus manos en forma de lata o de otro producto metálico”, ha indicado.