A Coruña vuelve a convertirse, por tercer año consecutivo, en la ciudad escogida por la fundación Marta Ortega Pérez (MOP) para albergar una retrospectiva de un fotógrafo de moda, en esta ocasión, del alemán Helmut Newton, considerado uno de los más importantes del mundo por su maestría a la hora de unir “provocación, contraste y poderío” en una sola imagen.
‘Helmut Newton. Fact&Fiction’, que recoge las imágenes, murales, recortes de prensa y objetos personales del fotógrafo, reconocido por su lenguaje “audaz, empoderador, sin complejos y siempre provocativo”, podrá visitarse desde este sábado 18 de noviembre hasta el 1 de mayo de 2024 en las instalaciones del Muelle de la Batería acondicionadas para el evento por la fundación.
Los comisarios de la muestra, el vicepresidente de la Fundación Helmut Newton, Philippe Garner, y el director de la misma, Matthias Harder, han guiado este viernes a los medios por las tres grandes salas que conforman el espacio y en las que el visitante será testigo de “la influencia en la fotografía moderna y en las artes visuales” de un fotógrafo con más de seis décadas de carrera.
Recibe al visitante un gran sala en la que se proyectan piezas audiovisuales con testimonios de modelos y amigos de Newton, además de vídeos que ilustran su proceso creativo y cómo fue su infancia, marcada por la Alemania nazi, de la que acabó escapando.
Dado que gran parte del trabajo de Newton fue para revistas de moda, en la segunda parte de la visita se pueden ver portadas a gran escala y se pueden consultar algunas de sus colaboraciones desde los años 70 hasta 2012 en pantallas táctiles. También aquí se exponen algunos de los efectos personales de Newton, como tres de sus cámaras, una maleta o parte de su colección de Barbies.
Provocación y contraste, clave para Newton
El grueso de la exposición lo conforman sus fotografías, desde los años 60 hasta entrados los 2000. “La selección de fotografías que conforma la exposición es una buena muestra del lenguaje visual audaz, empoderador y sin complejos característico de Newton, incluidos sus icónicos grandes desnudos y sus inolvidables retratos de personajes excepcionales como David Bowie, Margaret Thatcher, Charlotte Rampling, Jerry Hall o Naomi Campbell”, han explicado.
“Newton entendió siempre donde estaban los límites y trató de empujarlos todo lo que pudo, amoldándose a las diferentes contextos en los que trabajaba, las diferentes culturas”, ha señalado Garner, haciendo referencia a que no era lo mismo dirigir imágenes para el público americano que para el francés.
Ese carácter provocador se refleja en la serie de cuatro fotografías que, a gran escala, muestran a cuatro modelos completamente desnudas, así como en las dos imágenes contrapuestas que muestran una composición de otras cuatro mujeres: en una vestidas, y en otra, desnudas. En 1981, año de su publicación, supusieron “un gran escándalo” y, al mismo tiempo, su salto de las revistas a las galerías.
Además de la provocación, la contradicción era otra de las señas de identidad del berlinés; características con las que ayudó a “desarrollar una nueva fotografía de moda”. Mujeres con trajes de gala en una obra o disfrazadas entre rascacielos y que, además de provocar y mostrar ese contraste, recogen también la fuerza física de las modelos, su sensualidad y su poder.
Precisamente de esto último es buen ejemplo, ha indicado el director de la fundación de Newton, la fotografía “Charlotte Rampling as Venus in Furs” (París, 1972).
“Esto representa el trabajo de Helmut. Las líneas entre las categorías en las que trabajó (fotografía de moda, retrato, desnudo) se desdibujan. La propia Rampling dijo que sacó algo que ella no sabía que tenía. Cierta sensualidad, cierto poderío. Ayudaba a encontrar esa fuerza interior. Retrato, moda, poder y sensualidad. Eso es fundamental para Helmut”, ha apuntado Garner.
Otras influencias
Para el berlinés la luz natural y el mar eran también fuentes de inspiración. “Estoy seguro de que le habría encantado trabajar en A Coruña”, comenta Harder.
Bebía también del cine, como demuestra una fotografía en la que una mujer se agacha ante el sobrevuelo de un avión (‘Con la muerte en los talones’, de Hitchcock) o Velázquez, con dos retratos (uno de ellos autorretrato) que recuerdan a las Meninas y a Venus en el Espejo.
El autorretrato de inspiración española, “que mejor define al propio Helmut”, se encuentra en la última sala que, a modo de resumen, exhibe algunas de las imágenes seleccionadas por el propio artista para una colección creada a partir de 1991, cuando un infarto le hizo replantearse su vida y carrera; “profundizar en su imaginación y en lo que sentía, ir más lejos”.
Pero Helmut Newton cultivó otra fotografía, la paisajística. “Unas imágenes que siempre decía que nadie vería”, han bromeado los comisarios y que, por eso, han incluido en esta muestra. Fotografías evocadoras de los lugares que influyeron en su obra como París, Los Ángeles, Montecarlo, Berlín o Las Vegas y que demuestran que “era mucho más que un fotógrafo de moda”.
Tal y como ha explicado Matthias Harder, para esta exposición se han traído impresiones “muy especiales”. “A diferencia de otras exposiciones que hay en Roma o que se diseñan en Berlín y después se llevan a otros lugares, en este caso se han traído esas impresiones exclusivas de su trabajo a partir de los años 60 y en un periodo posterior”, ha apuntado.
“Conocí a Helmut en los años 2000. Me contrató para esta fundación y recuerdo que era un tipo muy directo, con mucho humor, el humor de Berlín. Era una persona muy agradable y muy curiosa. Hablábamos sobre la fotografía en general y él era curioso por todo. Y creo que esto es lo crucial, lo central de su trabajo”, ha reflexionado.
Esa curiosidad, ha continuado, es lo que lo ha llevado siempre a “ofrecer algo asombroso, algo contemporáneo” y por eso “lo contrataban tantas revistas”. “Probablemente Helmut Newton haya sido el fotógrafo más publicado”, ha asegurado.
Visitas guidas
El acceso a ‘Helmut Newton. Fact & Fiction’ es gratuito, si bien puede reservarse una visita guiada con un coste de cinco euros. La venta del merchandaising, apunta la organización, permite la puesta en marcha del programa ‘Future Stories’, que beca a diez estudiantes de arte gallegos para que desarrollen sus proyectos o hagan residencias en el exterior.
La fundación MOP dispone, también, de un programa educativo dirigido por artistas que gira en torno a sus exposiciones y pretende llevar la figura de grandes fotógrafos a las aulas gallegas.