Los acusados en el juicio por el asesinato de Samuel Luiz, ocurrido en julio de 2021 en A Coruña, participaron unos meses antes en la grabación de un vídeo que contiene expresiones homófobas y donde se los ve con armas blancas, según ha informado un agente durante la décima jornada del juicio. En el vídeo, grabado en abril de 2021, algunos de los procesados, encapuchados y portando navajas y machetes, cantan una canción que incluye frases como “maricas de mierda”.
Las declaraciones en esta jornada se han enfocado en el análisis de material visual y del contenido de los teléfonos móviles de los acusados, a cargo de agentes de la investigación. Uno de los policías, quien revisó los vídeos de la noche del crimen, comentó que los acusados no mostraban signos evidentes de intoxicación que afectaran su comportamiento. También señaló que Alejandro F.G., uno de los procesados, fue visto escondiendo una botella en su chaqueta antes de abandonar el lugar, luego de que otro de los acusados, Diego M.M, fuera expulsado del local.
Una “premonición” de lo que sucedería
En el volcado del teléfono de Kaio A.S.C., la fiscal resaltó que tras la agresión a Samuel hubo más de veinte llamadas realizadas por el acusado, con el aparente propósito de “lavar su imagen” en redes sociales, donde había comenzado a ser señalado como participante en el crimen. Entre las conversaciones analizadas, Kaio escribió mensajes defendiendo su inocencia: “No tengo nada que ver, las grabaciones me darán la razón. No soy homófobo y mucho menos asesino”, declaró en una de sus publicaciones.
Además de las grabaciones, en las sesiones de esta semana el responsable de la investigación describió el contenido de los vídeos de los acusados como una “exaltación de la violencia” y una “premonición” de lo que sucedería esa madrugada en el paseo marítimo de A Coruña. Sin embargo, las defensas de algunos de los procesados han insistido en que los acusados no golpearon a Samuel y han tratado de desvincular el contenido del vídeo con los hechos, argumentando que expresiones similares son habituales en ciertas letras de rap.