La Policía Local de A Coruña ha detenido, entre el sábado y el lunes, a tres hombres, de 60, 34 y 29 años, acusados de cometer delitos de violencia de género contra sus parejas. En el incidente más reciente, ocurrido en la madrugada del lunes, la víctima tuvo que ser trasladada a un centro hospitalario debido a las heridas provocadas por su presunto agresor.
Según informó el Concello de A Coruña a través de un comunicado, los hechos ocurrieron alrededor de las 05:30 de la mañana, cuando la Policía Local fue requerida para intervenir en un domicilio de la calle Industrial. Allí, los agentes arrestaron a un joven de 29 años, acusado de agredir a su pareja habitual con quien convivía.
Fue la tía de la víctima la que alertó a las autoridades, tras escuchar gritos y ruidos provenientes de la habitación de su sobrina. Al llegar al lugar, encontró a la joven sangrando por una mano, y observó que tanto las paredes como el suelo estaban manchados de sangre.
La víctima explicó a los agentes que, tras una discusión, su pareja comenzó a agredirla. Además de proceder a la detención del sospechoso, quien fue trasladado a los calabozos de Lonzas, se activó el servicio de emergencias médicas 061 para trasladar a la mujer al Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (CHUAC) y recibir atención por sus lesiones.
Incidentes del sábado y domingo
El primero de los tres sucesos ocurrió en la madrugada del sábado 14 de septiembre, a las 03:30 horas. Los agentes presenciaron cómo, a la salida de un local en la zona de Agra do Orzán, un hombre de 60 años perseguía a una mujer, alcanzándola y forcejeando con ella a pesar de los esfuerzos de la víctima por escapar. Aunque la mujer manifestó su intención de no presentar una denuncia, la policía procedió a detener al individuo de oficio. El detenido fue trasladado a dependencias policiales, donde quedó bajo custodia.
El domingo por la noche, alrededor de las 22:10 horas, la Policía Local detuvo a un hombre de 34 años en un domicilio ubicado en la Avenida de Ramón y Cajal. El sujeto violó una orden de alejamiento al residir con su expareja, quien había accedido a que convivieran juntos.
La intervención se produjo cuando un agente encargado de la protección de la víctima, informó de que su protegida había señalado que su expareja estaba causando destrozos en la vivienda. En el momento de la detención, el hombre declaró sufrir un trastorno mental, por lo que fue trasladado al CHUAC para ser evaluado por un psiquiatra.