El cuarto adulto detenido por el crimen de Samuel Luiz, Kaio, ha alegado ante la jueza que él no lo agredió y ha asegurado que los otros dos varones mayores de edad detenidos, Diego y Alejandro, le golpearon. «No lo toqué», ha apuntado Kaio en la declaración hecha el pasado 9 de julio ante la titular del Juzgado de Instrucción número 8 de A Coruña según un vídeo que ha trascendido a los medios de comunicación.
El joven ha afirmado en su declaración que el exclamó «¡Parad ya!» cuando llegó al lugar de la paliza. Según su relato, le preguntó a su amigo Diego, el primero en golpear, qué había pasado y este le respondió que Samuel y su amiga lo estaban grabando. La víctima se desplomó al ser golpeado por ‘Yumba’ (Alejandro), ha afirmado Kaio. Además, Kaio ha culpado a este de haberle pegado a Ibrahima, uno de los senegaleses que auxilió al joven.
Este cuarto detenido, el único de los cuatro adultos que respondió a las preguntas de la jueza, ha narrado que cogió el teléfono móvil de Samuel porque lo vio en el suelo y «no sabía de quién era». Incluso llegaron a querer comprárselo. «Te doy cien euros», le dijo un joven a Kaio, según su declaración en sede judicial. Posteriormente, ha reconocido que llegó a llevárselo a casa y ha subrayado que cuando se enteró por los medios de comunicación de que el dispositivo pertenecía al fallecido lo tiró porque «estaba asustado». Después de la agresión, ha contado, todos ellos se reunieron en el Parque Europa.
En el vídeo se aprecia cómo Kaio, el único que salió de los juzgados sin taparse la cara, respondió durante más de media hora a todas las preguntas de la jueza, la fiscal y los abogados. Lo hizo con todo lujo de detalles y sin derrumbarse ni un momento. No fue tal la entereza de su amigo Diego, quien pese a no responder a las cuestiones, comenzó a llorar ante la instructora.
Kati dice que protegió a la amiga de Samuel
Por su parte Catherine (Katie) ha respondido a las preguntas de su abogado, negando su implicación en los hechos. Ella niega haber azuzado al resto y haber pegado a la amiga de Samuel. «Yo la eché hacia atrás para que no llevara ningún golpe. Yo fui golpeada también en las piernas», ha enfatizado la chica, la única de los detenidos que se encuentra en libertad con comparecencias en el juzgado.
Esta joven ha remarcado que no conocía a Samuel, que no lo increpó, ni sabía nada acerca de su orientación sexual. Ella ha dicho que no lo tocó en ningún momento y que no participó en la agresión ni de manera indirecta. «Yo intenté parar a la gente», ha sostenido en su declaración ante la jueza.