El contrato de redacción del proyecto y construcción de la nueva Estación Depuradora de Augas Residuais (EDAR) de Foz ha sido adjudicado por 11,94 millones de euros a la Unión Temporal de Empresas (UTE) conformada por Espina y Delfín y Construcciones y Canalizaciones José Saa.
La obra está financiada en un 80% por la Unión Europea (UE) y en un 20% por Augas de Galicia, mientras que el Concello de Foz es el responsable de la puesta a disposición de los terrenos necesarios para la obra, para lo cual ya se han llevado a cabo todos los trámites y tan solo falta que la Xunta de Galicia declare el carácter urgente de la expropiación.
La oferta fija un plazo de 33 meses desde la formalización del contrato para redactar el proyecto, ejecutar la obra y poner en servicio la nueva depuradora. Según los informes publicados, el adjudicatorio planteó el bombeo directo desde el tanque de tormentas hasta la nueva EDAR, manteniendo el bombeo previsto en la Avenida de Viveiro únicamente para el caudal recogido en Llas 2.
“El plazo de ejecución de 33 meses incluye tres para redactar el proyecto, 18 de obra y doce de puesta en marcha; nos parece un plazo realmente corto, especialmente en lo tocante a la redacción del proyecto, que es complejo”, ha detallado el alcalde de Foz, Fran Cajoto.
En todo caso, ahora que se inicia la fase de redacción, el Concello de Foz —tras varias reuniones con Augas de Galicia— espera formar parte de la supervisión del proyecto, ya que será el responsable del mantenimiento de la infraestructura.
“Queremos el mejor proyecto posible: después de más de cinco años de retraso en el convenio firmado no nos importa esperar dos meses más, lo que nos preocupa es que la infraestructura funcione y resuelva el grave problema de depuración que tenemos en el Concello”, ha proseguido el alcalde.
En todo caso, Cajoto se ha comprometido a “colaborar en todo lo posible” con Augas de Galicia para conseguir “entre todos” que la depuradora esté lista cuanto antes, aunque “siempre exigiendo un proyecto con una buena solución técnica”.
“Si la construcción comienza a principios del próximo año será una buena noticia: hay que agradecer a las administraciones que financian la obra, la Unión Europea y la Xunta de Galicia, el esfuerzo económico para conseguir una Ría de Foz limpia y saneada”, ha concluido.