Un trabajador de Vestas iniciará este domingo un viaje hasta Dinamarca, con el objetivo de pedir en la sede central de la empresa que no se cierre la planta de Viveiro. El trabajador saldrá el domingo a las 10:30 horas desde la fábrica de Vestas en Chavín, donde se reunirán compañeros de trabajo y representantes del ayuntamiento para desearle suerte y un bueno viaje.
El Ayuntamiento de Viveiro explicó esta mañana que respalda, apoya y colaborará con esta iniciativa reivindicativa, así como con otras medidas de presión y la manifestación que recorrerá mañana, sábado 2 de octubre, las calles de Viveiro. “Vestas tiene en Viveiro una plantilla cualificada y unas instalaciones modernas, el cierre no tiene sentido y las administraciones implicadas debemos hacer un frente común para evitarlo”, asegura la alcaldesa, María Loureiro.
Por eso, el gobierno viveirense considera que» no se puede permitir que una empresa que tiene beneficios, que es productiva y que reconoce el trabajo de sus empleados y empleados de la planta de Viveiro, que son un ejemplo para todas las plantas que la empresa tiene en el resto del mundo, anuncie su cierre».
El ERE afectaría a un total de 115 empleos directos y supondría un agravamiento de la situación de la industria y del empleo no solo en la Mariña, sino también en muchos ayuntamientos próximos de la comarca de Ortegal. De hecho, el pleno de la corporación de Cedeira aprobó por unanimidad en su sesión común de septiembre, celebrada ayer, una moción apoyo a los trabajadores y trabajadoras de la planta de Vestas en Viveiro.
En la misma, el Ayuntamiento insta a la Consellería de Economía, Empresa e Innovación al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para que en el marco de sus competencia adopte “todas las medidas necesarias para exigir a la empresa Vestas que reconsidere su decisión de cierre y buscar soluciones alternativas”.
Manifestación de la plantilla en Santiago
Por su parte, el comité de Vestas Viveiro ha convocado una manifestación para el próximo martes día 5 a las 15:00 horas en Santiago, donde marcharán desde el centro comercial As Cancelas hasta la sede de la Xunta en San Caetano. Será en la víspera de la nueva reunión que la empresa tiene convocada para abordar el expediente de regulación de empleo (ERE) vinculado al cierre de la planta, que prevé ejecutar a finales de año.
Los trabajadores, que esta semana se desplazaron ya a Compostela para reunirse con los grupos parlamentarios coincidiendo con el debate de su problemática en el pleno de la Cámara, intentan paralizar el periodo de consultas del ERE, que la compañía dio por abierto el pasado martes.
Previamente, el lunes, la Xunta acordó con el comité constituir una mesa industrial a la que invitan a representantes de la firma y del Gobierno central, con la finalidad de encontrar alternativas al cierre de la factoría.
En el pleno del Pazo do Hórreo, el PSdeG urgió al Gobierno gallego a reunir esa mesa industrial, mientras que el BNG pide «actuaciones inmediatas para salvar» la fábrica. El vicepresidente económico de la Xunta, Francisco Conde, subrayó el miércoles que el Gobierno gallego «no puede estar más en contra» del anuncio de cierre de la planta de Vestas en Viveiro, pero es algo que achaca a la política energética del Ejecutivo central.