El Ayuntamiento de Santiago, a través de la Concejalía de Parques y Jardines, acaba de poner en valor las seis fuentes ornamentales de la alameda compostelana, haciéndolas funcionar de manera sostenible y dotándolas, entre otros elementos, de un nuevo sistema de iluminación más acorde con el entorno en el que se encuentran.
En el parque de la alameda hay seis fuentes ornamentales, la del Paseo de los Leones, la de los Condes de Altamira, el estanque del Ojo, la fuente del Paseo Central, la de la Concha y la de San Clemente, cinco de las cuales estaban vacías y sin funcionamiento. El motivo de esto era que no disponían de un sistema de recirculación de agua, por lo que para funcionar tenían que consumir de forma continua agua potable de la red de abastecimiento. Además, cabe añadir que las fuentes no estaban impermeabilizadas.
Con esta situación de partida, desde una perspectiva ambiental responsable, se tomó la decisión de mantener las fuentes sin agua, pues su funcionamiento supondría un consumo próximo a los 100.000 m3 de agua anuales. unos 100 millones de litros, lo que supondría una pésima gestión del recurso. Para comprender este consumo de agua basta otro dato: el consumo anual de agua para regar todo el parque de la Alameda es de unos 7.595 m3/año, es decir, las fuentes funcionando con agua de la traída consumirían anualmente 12 veces más que el agua empleada para regar el parque.
El parque más visitado de Compostela
Situado a medio camino entre dos de los elementos más emblemáticos de la ciudad, el Campus Sur y el casco antiguo, el parque de la Alameda de Santiago contiene un magnífico patrimonio arquitectónico y botánico. En sí misma constituye, desde el siglo XIX, un punto importante de referencia como zona de ocio y su situación privilegiada, bordeando una parte de la ciudad histórica y con una magnífica perspectiva sobre su cara oeste, la más monumental, la convierte en la principal y más visitada zona verde urbana de la ciudad.
Por todo ello, el Ayuntamiento consideró necesario poner en valor estas seis fuentes a través de un proyecto de restauración que permitiera un funcionamiento sostenible y una mejora de su aspecto, en consonancia con el importante espacio de la ciudad en el que se encuentran.
Para cumplir con el objetivo se instalaron sistemas de recirculación de agua, mediante el empleo de bombas sumergibles, e impermeabilizando las fuentes para evitar las fugas existentes. Este nuevo sistema supone un ahorro de agua estimado de 94,608 m3/año.
Nuevo sistema de iluminación
Con esta reforma también se dotó las fuentes de la alameda de una nueva iluminación, que resalta su aspecto y mejora su contemplación en las horas nocturnas. Para ello, se emplearon proyectores equipados con lámparas LED de alto rendimiento y bajo consumo colocados en el fondo del vaso con accesorios especiales que respetan la impermeabilización del mismo y permiten la instalación bajo la lámina de agua.