Aunque la pandemia ha dejado de ser el centro de la vida de la gente, lo cierto es que el coronavirus sigue expandiéndose y, tras más de dos años de mascarillas y distancia social, los contagios no cesan. Ni siquiera disminuyen. Lo que sí se puede constatar es que el virus no es tan grave, pues ya no se atienden neumonías bilaterales como al principio, lo que ha disminuido notablemente los ingresos en Cuidados Intensivos.
El área sanitaria de Santiago no es una excepción a esta norma. Y es que los casos activos a fecha de este viernes son 2.868, cuando el 6 de mayo del año pasado eran un total de 395. Esto quiere decir que, aunque parezca sorprendente, en esos momentos Compostela ha multiplicado por siete los positivos de hace un año. Ello teniendo en cuenta que la mayoría de casos ya no se notifican por ser autodiagnósticos.
También han aumentado en el distrito que abarcan la capital gallega y el Barbanza los hospitalizados con covid-19. Este viernes, según los datos del Sergas, son 97 mientras que en la misma fecha del 2021 eran 26. Si bien es cierto que las variantes y la inmunidad adquirida han hecho que la letalidad disminuya. Por eso, en la UCI de Santiago solo hay un paciente con coronavirus, mientras que hace un año había cuatro.