El Concello de Santiago de Compostela ha presentado este miércoles un estudio que propone consolidar la Praza de Abastos como un centro de alimentación de proximidad y pieza clave en una estrategia alimentaria local más amplia. El informe, elaborado por el Centro de Investigación Interuniversitario das Paisaxes Atlánticas Culturais (Cispac), destaca la necesidad de preservar la identidad del mercado y reforzar su papel como motor de un sistema alimentario agroecológico.
La presentación del documento estuvo a cargo del concelleiro de Mercados, Xan Duro, junto a los autores del estudio, Ruth Varela y David Soto. Según explicó el edil, el Concello decidió encargar este informe tras analizar el Plan de Revitalización de la Praza de Abastos elaborado por Mercasa, un documento que generó controversia entre los placeros y otros sectores vinculados al mercado.
El estudio del Cispac será presentado públicamente el jueves en un acto en la Casa das Máquinas, en el que participará también Juan Echanove, jefe del equipo de Derecho a la Alimentación de la FAO.
Un mercado con identidad propia
Uno de los principales aspectos que subraya el informe es que la Praza de Abastos de Santiago sigue manteniendo un fuerte vínculo con la producción local y la alimentación de proximidad. A diferencia de otros mercados municipales en España, que han perdido su función original para convertirse en espacios predominantemente turísticos o gastronómicos, la Praza de Abastos compostelana conserva su carácter tradicional, con la presencia de agricultores locales, vendedoras de huerta y placeros que combinan producción propia con venta.
El edil Xan Duro destacó que el estudio confirma un amplio consenso sobre la necesidad de preservar esta identidad y reforzar los lazos entre productores, comercializadores y consumidores. “El futuro de la Praza da Abastos debe pasar por mantener su esencia y su apuesta por el producto de proximidad”, afirmó.
En este sentido, el gobierno municipal ha descartado la propuesta de Mercasa, ya que su aplicación implicaría transformar el mercado siguiendo modelos más propios de los centros comerciales, priorizando el turismo y la gastronomía por encima de su función como mercado de abastos tradicional.
“Eso no significa que no tengamos en cuenta algunas de sus recomendaciones para la mejora del mercado, siempre y cuando no supongan alterar su esencia, que queremos conservar”, aclaró Duro.
Un motor para la estrategia alimentaria de Santiago
Más allá del propio mercado, el informe del Cispac plantea la Praza de Abastos como un elemento central dentro de una estrategia alimentaria agroecológica local. Esta visión está en línea con el Pacto de Milán, un acuerdo internacional firmado por Santiago en el que las ciudades se comprometen a impulsar sistemas alimentarios sostenibles, inclusivos y diversificados.
El estudio destaca que en Santiago de Compostela existe una alta demanda de productos ecológicos y de proximidad, mayor incluso que la media estatal. Sin embargo, la producción local no alcanza a cubrirla, lo que obliga a los comerciantes del mercado a recurrir a intermediarios.
David Soto, uno de los autores del informe, explicó que este déficit de producción local se ha ido acentuando en los últimos años, por lo que cualquier proyecto de futuro para la Praza de Abastos debería incluir medidas para potenciar la producción agrícola de la comarca.
El informe propone reforzar la conexión entre el mercado y la producción local en un ámbito más amplio que incluya no sólo Compostela, sino también las comarcas de Barbanza, Barcala, Noia y O Sar. El objetivo sería consolidar un sistema alimentario basado en circuitos cortos de comercialización, garantizando así una oferta suficiente de productos frescos, ecológicos y de kilómetro cero.
Infraestructuras y conflictos con el turismo
Otro de los aspectos abordados en el informe es la necesidad de mejorar las infraestructuras y la organización del mercado para garantizar su funcionamiento óptimo. Entre las demandas más recurrentes de los placeros se encuentran la ordenación de los tiempos de carga y descarga, la mejora del aparcamiento en la zona, el mantenimiento de las instalaciones o la adaptación de los espacios a las necesidades de las vendedoras tradicionales.
Además, el documento señala la necesidad de regular la presencia de grupos turísticos dentro del mercado. Según Ruth Varela, otra de las autoras del estudio, estos grupos pueden entorpecer el funcionamiento ordinario de la Praza de Abastos, afectando a los comerciantes y clientes habituales.
“El turismo es una parte importante de la ciudad, pero no debe afectar negativamente a los mercados de proximidad. Es necesario regular estas visitas para que no interfieran con la actividad diaria”, explicó Varela.
Presentación del informe y próximos pasos
El estudio será presentado en un acto público el jueves a las 18:30 horas en la Casa das Máquinas. La sesión contará con la participación del experto en derecho a la alimentación de la FAO, Juan Echanove, quien aportará su visión sobre la importancia de los mercados municipales en la seguridad alimentaria de las ciudades.
Tras esta presentación, el Concello de Santiago valorará las medidas concretas que podrían aplicarse para consolidar la Praza de Abastos como referencia en la alimentación de proximidad y como motor de un sistema agroecológico local.
El reto será encontrar un equilibrio entre la modernización del mercado y la preservación de su esencia, evitando que siga la tendencia de otros mercados que han acabado transformados en espacios turísticos sin relación con el tejido productivo local.
Con esta apuesta, el Concello busca garantizar que la Praza de Abastos de Santiago siga siendo un mercado vivo, accesible y enraizado en su territorio, ofreciendo productos frescos y de calidad tanto a los compostelanos como a los visitantes que deseen conocer la verdadera esencia gastronómica de la ciudad.