Santiago de Compostela ha estrenado este jueves el enlace Orbital, la conexión de la la autopista AP-9 y la autovía A-54 en el norte de la capital gallega con un vial que, con su inauguración, marca un nuevo “hito” en el desarrollo de la ciudad que “mejorará el día a día” de los vecinos y las empresas.
Casi tres lustros después de su concepción en el plan de urbanismo del año 2008 y tras una inversión de casi 28 millones de euros, el enlace Orbital —denominado técnicamente SC-30— ha sido inaugurado este jueves con presencia del secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano, y la alcaldesa compostelana, Goretti Sanmartín, junto al delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco.
El nudo, que consta de un vial de menos de un kilómetro, conecta la Autopista del Atlántico con la autovía Lugo-Santiago, que sirve, a su vez, de conexión con el Aeropuerto Santiago-Rosalía de Castro. Además, también actúa de entrada y salida a los polígonos de A Sionlla y Costa Vella, así como al núcleo de San Marcos.
El Orbital se verá completado con el denominado ‘Orbitaliño’, que se encuentra todavía en fase de redacción del proyecto, presupuestado en otros 25 millones de euros para enlazar A Sionlla, Costa Vella, el polígono del Tambre, la AP-9 y la N-550.
La nueva infraestructura en el norte de la capital gallega permitirá, en palabras del secretario de Estado, una “conexión directa y eficiente” con los polígonos industriales y comerciales de Santiago, además de reducir los flujos de tráfico, “especialmente en hora punta”, con la consecuente bajada en los tiempos de viaje en esta zona de la ciudad.
Todo esto servirá para “mejorar la calidad de vida de los vecinos” y también de las empresas que operan en los principales polígonos industriales de la ciudad al revalorizar sus “localizaciones” a la hora de ser atractivas para las empresas que buscan desarrollar sus negocios.
En todo caso, Santano ha aclarado que todavía están pendientes de concluir las obras, aunque la vía entrará en servicio de forma parcial para llevar a cabo unas actuaciones “en una zona muy concreta y periférica” del Orbital que “no afecta” a la “operatividad plena” del enlace.
“Hito” en la ciudad
Por su parte, la regidora santiaguesa ha calificado de “día muy importante” para Compostela la finalización de una infraestructura que considera una “pieza fundamental” y “muy potente” que marca un nuevo “hito” en su desarrollo y también define los “nuevos desafíos” de futuro para la ciudad.
Sanmartín ha trazado una comparativa con otros momentos históricos de la evolución de Santiago, como la médula del siglo X que constituyó el “primer cerco” de la ciudad o la muralla construida por el obispo Cresconio que dio forma a la almendra de lo que es hoy el casco histórico y se convirtió entonces en el resultado del “primer crecimiento urbano” de Compostela.
Ya en el siglo XX, Santiago “continuó su expansión formando una tela de araña” que conecta su centro con los anillos exteriores, “de norte a sur, por el este”, un proceso en el que la construcción del periférico supuso “otro de esos hitos” en un momento en el que la ciudad “despegaba” como capital del país y referente cultural y turístico.
En este sentido, la alcaldesa ha subrayado que los sucesivos gobiernos municipales han apostado por “ordenar” el crecimiento desde la “protección” del “corazón” de la ciudad, generando “nuevos espacios para el crecimiento” generando “espacios de calidad urbana” en el interior.
Así fue como, según Sanmartín, fue concebido el enlace Orbital en el plan general de ordenación municipal del año 2008 y que, una vez se complete con el Orbitaliño, permitirá dar servicio y apostar por el desarrollo logístico e industrial en el norte de la ciudad con su conexión con el polígono del Tambre, la futura plataforma logística y la Variante de Aradas.
Por ello, ha celebrado el “esfuerzo” que ha supuesto sacar adelante esta infraestructura a través de una inversión de 28 millones de euros que, para Sanmartín, están “justificados” por el “rendimiento” que dará a la ciudad.