El colapso en el servicio de Urgencias del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS) continúa una jornada más: este martes llegó a haber momentos con hasta 31 pacientes graves viéndose obligados a esperar en los pasillos en sillas de ruedas y camillas. Esto sucedió a las 17:30 horas, cuando también había 36 pacientes pendientes de ingreso esperando por una cama en planta.
Dos horas más tarde la situación todavía seguía desbordada, con 18 pacientes esperando en los pasillos a las 20:00 horas. Al finalizar la jornada de la noche eran 40 los pacientes con su ingreso firmado esperando para una cama a pesar de que el grado de ocupación en las últimas 24 horas, de acuerdo con lo publicado por la gerencia, era tan solo del 59%.
«Así está la situación: hay camas disponibles, pero los pacientes esperan horas o días en la sala de observación del servicio de Urgencias para ocupar una cama en planta, con pacientes graves esperando en los pasillos en una situación que viola su dignidad y su intimidad, además de la propia demora de la atención», denuncian desde la Asociación de Pacientes e Usuarios do CHUS.
La asociación había anunciado este mismo martes que pondría en conocimiento de la Valedora do Pobo «los catorce colapsos conocidos desde el 12 de diciembre de 2020, que afectaron a 155 pacientes graves». Durante la jornada del lunes la doctora Fátima Nercellas había denunciado otro colapso en Urgencias, con 22 pacientes graves en los pasillos del servicio y otros 33 pendientes de ingreso en la sala de observación.