La ciudad de Santiago de Compostela ha homenajeado un año más la estatua de Ramón María del Valle-Inclán, situada en el Paseo dos Leóns de la Alameda, que ha vuelto a lucir su insigne bufanda roja. Una prenda simbólica colocada por su nieto, Xaquín del Valle-Inclán, que establece una conexión con la colocación de una famosa bufanda blanca en la estatua del autor en el paseo de Recoletos de la ciudad de Madrid.
Ha sido a través de un acto conmemorativo que organiza desde 2007 la Fundación Granell en colaboración con el Museo Valle-Inclán de A Pobra do Caramiñal (A Coruña), al que han asistido el alcalde de la ciudad, Xosé Sánchez Bugallo, y distintos miembros de la corporación municipal y la cultura compostelana.
Durante la jornada, los presentes han participado en una lectura que recorría fragmentos de la obra de este autor gallego que, como ha recordado el director del museo, Antonio González Millán, “enterrado no quiere decir olvidado”.