Marzo puede a ser un gran mes para el Baxi Ferrol. Tiene varias citas marcadas en rojo en su calendario, como la participación en la Copa de la Reina a finales de mes y la recepción de uno de esos premios que gustan, por lo significativos. La plantilla ferrolana será distinguida por la ciudad con el premio 8M en el Día Internacional da Muller a propuesta, por unanimidad, del Consello de Igualdade local.
Se consolida así como claro referente para las mujeres deportistas, especialmente las más jóvenes, de Ferrolterra y tendrá la oportunidad de participar en un acto que trasciende el baloncesto para “apoyar referentes femeninos en el deporte en toda su diversidad”, según afirmó la edil del área, Elvira Miramontes, al anunciarlo. Pero, a mayores, el Baxi puede llegar a todas estas citas con algo en el bolsillo que les dé un significado aún más especial, un yoyó roto en forma de permanencia matemática en la Liga Endesa.
Cualquier aficionada de deportes de equipo sabe lo que es una escuadra yoyó, una formación que oscila frecuentemente entre categorías, en ocasiones de una temporada para otra, sin prácticamente tiempo para asentarse en la superior, pero siempre rindiendo mejor que sus rivales de la inferior.
El yoyó del Baxi Ferrol bajó en 2019, después de estar en lo más alto durante dos campañas históricas en las que consiguió entrar en la lucha por el título. Y ha estado bajando y subiendo desde entonces, con descensos entre lágrimas y ascensos entre pandemias y vítores, seguidos de nuevo por descensos y así hasta este mes de marzo, donde todo eso puede cambiar. Romper el yoyó y apuntalar la posibilidad de asentarse en la máxima categoría es el reto que plantea este mes de marzo para el Baxi, que tiene varios duelos directos que podrían llevarlas a cruzar la permanencia de su lista de deberes para empezar a creer en meterse en los play-off.
El duelo ante el Celta Zorka del 2 de marzo en Vigo es el primero de tres que enfrentarán a las de Lino López con los equipos que parecen llamados a pelear por seguir en la categoría. Le seguirá el Spar canario en A Malata la semana siguiente y la visita al que, para entonces, debería estar ya desahuciado Pajariel, en Bembibre el 16 de este mes.
Estas dos formaciones se presentan como las candidatas más claras a ocupar las plazas de descenso y las leonesas parecen haberse resignado a su suerte tras acumular meses sin ganar un duelo. Las isleñas, por su parte, están aferrándose a sus opciones, habiéndose reforzado recientemente con la llegada de Astou Ndour -MVP de la Liga en la jornada 21-; pero siguen dos puntos por detrás del Celta, el tercero en discordia en este momento y próximo rival de las ferrolanas. Y en una liga en la que todos los equipos suman cada jornada y los triunfos solo valen dos puntos, esa pequeña diferencia puede llegar a ser determinante.
La victoria del Baxi ante el Cadí La Seu del último encuentro de febrero en A Malata y los próximos enfrentamientos directos entre equipos que están en la zona media con las de Lino López pueden contribuir también a firmar más pronto que tarde el primer objetivo de la campaña. Una vez roto el yoyó, como diría alguna de las jugadoras que milita en el equipo azul, “sky is the limit”, el cielo es el límite. Terminar entre las ocho primeras es factible y disputar de nuevo la fase decisiva por el título serviría de premio a una formación ferrolana que quiere revivir momentos de estabilidad, dejar atrás etiquetas y, sobre todo, olvidarse de un juguete que gusta poco en el deporte.
