La futura mina de litio de Doade, en Beariz, se encuentra en un punto clave de su desarrollo tras haber sido seleccionada por la Comisión Europea como uno de los 47 proyectos estratégicos de explotación de materias primas críticas. Esta designación busca garantizar el suministro de minerales esenciales para la transición energética y la movilidad eléctrica en Europa.
El proyecto, promovido por Recursos Minerales de Galicia, una filial del Grupo Samca, ha solicitado formalmente en enero de 2025 la concesión de explotación ante la Xunta de Galicia. Con una inversión prevista de 120 millones de euros y la creación de 320 empleos directos e indirectos, esta mina subterránea tendrá una vida útil estimada de 42 años.
Los plazos
El plan de trabajo de la empresa prevé que en este 2025 el proyecto pase a exposición pública y, de cumplirse su cronograma, se produzca la concesión de la explotación. Así, en 2026 comenzarían las excavaciones y la construcción de la planta de procesado. En 2028 empezaría a operar a pleno rendimiento: extraería 500.000 toneladas de mineral al año, con una producción estimada de 93.000 toneladas anuales de concentrado de litio.
La mina estará ubicada en una extensión de 13,6 hectáreas de terrenos vecinales, con una exploración autorizada en un área de 1.690 hectáreas en municipios de Ourense y Pontevedra. Además del litio, se extraerán feldespatos y moscovita, esenciales para la industria cerámica.
La defensa del Gobierno central
Desde el Gobierno de España, el delegado en Galicia, Pedro Blanco, ha destacado la importancia estratégica del proyecto, asegurando que este «es un primer paso para garantizar el suministro de un elemento de absoluta necesidad». Asimismo, ha subrayado que la consideración de la mina como estratégica permitirá acelerar permisos y concesiones, además de facilitar el proceso administrativo.
La Comisión Europea también ha incluido otros dos proyectos de litio en el norte de Portugal dentro de su estrategia de materias primas críticas: la Mina Romano en Montealegre y la Mina de Barroso en Boticas.
Críticas y oposición al proyecto
A pesar del impulso institucional, la mina de Doade cuenta con oposición por parte de organizaciones ecologistas y vecinales. Colectivos como el Sindicato Labrego Galego, la Plataforma Mina Touro-O Pino Non y Ecoloxistas en Acción han emitido un comunicado conjunto en el que denuncian los impactos ambientales del proyecto, incluyendo el riesgo de contaminación de acuíferos y la posible generación de aguas ácidas.
Asimismo, critican la falta de transparencia en la selección del proyecto como estratégico y advierten que esto permitirá a la empresa beneficiarse de expropiaciones forzosas y un proceso de tramitación acelerado. La plataforma SOS Suído Seixo ya ha anunciado que recurrirá ante la Comisión Europea y, si es necesario, ante el Tribunal de Justicia de la UE, al considerar que el estatus de «proyecto estratégico» podría flexibilizar normas ambientales.
Mientras tanto, la eurodiputada del BNG, Ana Miranda, ha denunciado que «Galicia no puede ser un territorio de expolio para satisfacer los intereses bélicos y el proyecto de rearme de la Unión Europea».