La Fiscalía de Medio Ambiente ha llevado a cabo este martes una inspección de la balsa de lodos que Alcoa mantiene en su planta de Xove, en Lugo.
Esta actuación, que contó con la colaboración de efectivos del Seprona, Policía Judicial y un helicóptero, forma parte de los controles periódicos a la instalación.
Desde Alcoa han señalado que esta inspección «no reviste excepcionalidad» y que se desarrolló «con normalidad» con el fin de verificar sobre el terreno la información previamente facilitada a los organismos públicos.
Esta visita coincide con el anuncio de la reanudación del proceso de rearranque de la planta de aluminio de San Cibrao, paralizada tras el apagón eléctrico del pasado 28 de abril. Un reinicio que se completará en 2026, a pesar de que el acuerdo de viabilidad firmado con los trabajadores preveía que la fábrica estaría completamente operativa en octubre de este mismo año.
