El Museo Etnográfico de A Capela vuelve a organizar este verano la actividad «Ven a otro tiempo», una ETNOrruta diseñada para profundizar en la historia y cultura de la región. A través de visitas guiadas y recorridos, los visitantes podrán explorar el legado histórico de los habitantes locales. Esta actividad se llevará a cabo durante los meses de agosto y septiembre, ofreciendo un recorrido de 3,5 km donde se aprecia el patrimonio cultural y natural.
La ETNOrruta incluye paradas en la Casa do Pazo, el Parque Etnográfico do Sesín y la Escola. Las visitas se realizarán todos los miércoles y sábados, y también se podrán concertar para grupos de más de cinco personas fuera de estos días. La programación comienza a las 11:00 horas con una visita guiada a la Casa do Pazo. A las 12:00 horas, los participantes inician la ruta «Máis Alá dos Eidos» con guía, que incluye paradas en O Pazo, Gunxel, Pena dos Mosqueiros y el Parque Etnográfico do Sesín. La jornada termina a las 13:30 horas con una visita guiada a la Escola.
Vuelta a los años 40
Secundino García, responsable del museo, detalla: “El museo tiene tres sedes: la Casa do Pazo, que es la recreación de la casa rural tradicional; el Parque Etnográfico do Sesín, que explica cómo aprovechaban los recursos del medio; y la visita a la Escuela, que es una recreación de una escuela de hace cien años”.
El Parque Etnográfico del Río Sesín, uno de los puntos destacados, es un espacio que homenajea los métodos tradicionales de explotación de recursos naturales como el agua, el suelo y las plantas. Los visitantes pueden observar molinos, puentes, presas y otros elementos del patrimonio etnográfico, preservados por su sostenibilidad y respeto al medio ambiente. Además, “verán grabados sobre los canteros y actividades tradicionales como la recogida de castañas, la producción de carbón y miel, y el funcionamiento de los molinos, que incluso pueden ponerse en marcha durante la visita”, explica Secundino García.
Ya durante la ruta por la Casa do Pazo, se hará «un recorrido por la cocina, el pasadizo, el cuarto, la sala, y por las construcciones adyacentes, como son el hórreo, el horno o los cobertizos, para conocer multitud de utensilios y aperos y herramientas de los oficios tradicionales de la zona: el herrero, el cantero, la tejedora, el zuequero, el hojalatero, la costurera, el serrador, …».
Reliquias y vestigios
Por último, la visita a la Escola recrea un aula de hace aproximadamente cien años, «un tesoro abierto que guarda verdaderas reliquias y curiosidades, vestigios de una época: pupitres de madera, pizarras, mapas, ábacos, globos terráqueos, cartillas, iconografía, cuadernos, … Patrimonio educativo que refleja la huella de lo que fuimos y se convierte en el mejor libro de pedagogía que podemos desear».
El museo surgió en 1981 tras una experiencia sociopedagógica con contribuciones de alumnos, profesores y vecinos, con la recopilación de antiguos elementos con el objetivo de recuperar y dar a conocer la cultura tradicional gallega. “Durante los ochenta y noventa, los niños recogieron de sus casas objetos que habían perdido su valor de uso, formando una colección que más tarde se reubicó en la Casa do Pazo, la sede central del museo”, cuenta. Ahora, todos esos elementos cobran un especial valor, manteniendo en la memoria una herencia de un pasado no tan lejano.