Si se quiere ir desde As Pontes hasta la Punta de Estaca de Bares, el trayecto por carretera será el más habitual. Sin embargo, existe la posibilidad de seguir una vía de comunicación paralela al asfalto, o Camiño dos Arrieiros, nombre que recibe por los transportistas que lo transitaban antiguamente y que discurre por la Sierra de A Faladoira. Este accidente geográfico, que forma parte de la Dorsal Gallega, nace en As Pontes y continúa hacia Mañón y Ortigueira durante unos 50 kilómetros.
Por las crestas de la Sierra de A Faladoira, se dispone un camino que fue naturalmente una vía de unión entre As Pontes y el Cantábrico, empleado desde los tiempos más antiguos. De hecho, esta senda probablemente sea una de las más antiguas conservadas en la península ibérica. Su origen, según diferentes estudios, se remonta al período neolítico. Túmulos prehistóricos, asentamientos de la Edad de Hierro así como de las épocas romana y medieval flanquean el camino. Durante la ruta, se puede ver el dolmen “Forno dos Mouros”, que data de 6.000 años atrás.
Dificultad variable de las rutas
No es obligatorio hacer los 50 kilómetros de la senda, sino que se puede acceder al camino en prácticamente cualquier punto del recorrido. De hecho, la dificultad de la mayoría de las rutas es baja, dado que es un camino mayoritariamente llano.
Frente a estos elementos milenarios, también se encuentran otros más recientes enmarcados en el paisaje. Dada su altitud, la zona está repleta de aerogeneradores que se intercalan con tierras de cultivo abandonadas donde prolifera el eucalipto.

En lo que respecta a los datos de la ruta, 752 metros es la altitud máxima que se alcanza, concretamente en O Alto do Caxado, el punto más elevado de A Serra da Faladoira. Por otro lado, se presentan 113 mámoas, túmulos funerarios neolíticos del camino, contabilizados en la última investigación realizada por la asociación Seitura 22. Este estudio también registró castros, yacimientos romanos, capillas, cruceros y otros bienes de tipo arqueológico, etnográfico y arquitectónico a lo largo de los 50 kilómetros del camino.
Un espacio natural con vistas de postal
La riqueza de la zona no es solo de tipo histórico, sino también natural. Por eso, la protección de una parte de la sierra está incluida en el espacio protegido LIC/ ZEC “Ortigueira Mera”. La altitud de la zona ofrece excelentes panorámicas sobre todo el entorno entre O Xistral y A Capelada. Desde el alto de A Faladoira, a 600 metros de altitud, los ojos alcanzan hasta el Cabo Ortegal en los días despejados.
Con la llegada de la primavera las posibilidades de nieve se reducen; sin embargo, es recomendable llevar bastón, prenda impermeable, así como comida y agua. Si se quieren mejorar las vistas que ofrece la sierra, hace falta incluir unos prismáticos. También existe la posibilidad de realizar el recorrido en bicicleta de montaña. En función del ayuntamiento en que iniciemos la ruta, Ortigueira, As Pontes o Mañón, las oficinas de turismo cuentan con mapas de las posibles rutas.
Si los 50 kilómetros son inabarcables en una única jornada y hacer la ruta por tramos es insuficiente, se puede optar por realizarla en etapas. Se aconseja dejar un vehículo en la meta y otro en la salida o contratar un taxi para volver al punto de partida.