El crimen de Cabanas llega a juicio tras una década de investigación y la confesión del acusado

El acusado, detenido en octubre de 2023 y en prisión provisional en León, se enfrenta a cargos de agresión sexual y asesinato, delitos por los que podría ser condenado a prisión permanente revisable
El detenido por el crimen de Elisa Abruñedo tras declarar en sede judicial este jueves 19 de octubre SOCIEDAD ESPAÑA EUROPA GALICIA AUTONOMÍAS AMP2.- Prisión comunicada y sin fianza para el detenido por el crimen de Elisa Abruñedo, acusado de dos delitos
El detenido por el crimen de Elisa Abruñedo tras declarar en sede judicial este jueves 19 de octubre | EP

El Juzgado de Instrucción número 2 de Ferrol ha dado por concluida la fase de instrucción del asesinato de Elisa Abruñedo, la vecina de Cabanas cuyo cuerpo fue encontrado en septiembre de 2013 cerca de su domicilio tras varias horas desaparecida. La justicia ha decretado la apertura de juicio oral contra Roger Serafín Rodríguez., un vecino de Narón que fue detenido en octubre de 2023 tras más de una década de investigación y que, finalmente, confesó ser el autor del crimen.

El juicio se celebrará en la Audiencia Provincial de A Coruña y contará con un jurado popular. Al acusado se le imputan delitos de agresión sexual y asesinato, cargos que lo mantienen en prisión provisional en un centro penitenciario de León.

Los indicios que sostienen la acusación

Según la investigación, la tarde del 1 de septiembre de 2013, el acusado habría visto a la víctima caminando sola y decidió detener su vehículo en un camino vecinal. Se bajó, la abordó por la espalda, la golpeó y la inmovilizó. Después, la llevó hasta una zona boscosa, donde presuntamente la agredió sexualmente.

Los informes policiales y forenses señalan que la mujer fue apuñalada en el torso y el cuello con un arma blanca, lo que le provocó la muerte. La jueza destaca que existen “indicios racionales y suficientes de criminalidad” contra el acusado, basándose en su confesión, los testimonios recogidos y los informes periciales elaborados por la Guardia Civil, el Instituto de Medicina Legal de Galicia (IMELGA) y otras unidades especializadas.

La resolución judicial es firme y no admite recurso. Ahora, el caso pasa a manos del jurado popular, que será el encargado de determinar la culpabilidad del acusado tras un proceso que pone fin a una investigación de más de diez años.

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