Los vecinos y vecinas de Pontedeume han manifestado estos días su indignación y disgusto por los dos actos vandálicos ocurridos en menos de 24 horas en el entorno del paseo marítimo de la villa eumesa. El primero de ellos se produjo en una exposición que la concejalía de Educación del Concello había organizado junto con el CPR Luis Vives y que llevaba por título “Noutras peles”, con el fin de concienciar sobre el respeto a las diversidades sexuales. Una pequeña muestra muy llamativa y vistosa y que “había gustado mucho a los vecinos y a los usuarios del paseo marítimo”, explica la edil del área, Alejandra Bellón.
Sin embargo, la intolerancia de algunos hacia este tipo de movimientos inclusivos se hizo patente durante la pasada noche con el destrozo de los maniquíes que componían la exposición -cada uno representando una identidad sexual-. Unos actos que fueron puestos en conocimiento de la Policía Local de la localidad y que ya están siendo investigados. Además, se cree que el activo vandálico pudo realizarse fuera del horario permitido del toque de queda, ya que algunos vecinos aseguraron que sobre las 22.00 horas “estaba todo en orden”.
“Esto atenta no solo contra la libertad de expresión y los bienes ajenos, si no que demuestra el poco respeto por el trabajo de los centros escolares de nuestra villa que de forma ejemplar inculcan en nuestras hijas e hijos la idea de un mundo diverso y sin exclusiones”, lamentó Alejandra Bellón.
A pocos metros de allí, en uno de los pilares de la AP-9 que se encuentran en la zona del paseo, esa misma mañana apareció una pintada de apariencia ultraderechista con el lema “socialismo nacional contra el globalismo”, junto a una cruz celta, muy utilizada dentro de la simbología nazi y pintada con los colores blanco, negro y rojo propio de este movimiento.
