Los alcaldes de Cedeira, Pablo Diego Moreda Gil, y Valdoviño, Alberto González Fernández, se declararon “sorprendidos” por el comunicado difundido este jueves por la Delegación Territorial de la Xunta de Galicia, en el que se sitúa el origen de los altos niveles de contaminación detectados en los bancos de producción marisquera en dos focos de la red de saneamiento municipal de Cedeira. Moreda Gil explicó que se trata de “dos fugas puntuales que por supuesto van a ser reparadas, pero que no explican en absoluto” el resultado de los análisis. “Es bastante más importante el hecho de que la zona de Portos no haya hecho las obras de saneamiento, que llevamos demandando tanto tiempo”, señaló el regidor.
Moreda Gil lamentó que “de una reunión que se desarrolló en un tono cordial y con voluntad constructiva”, la Xunta saque la única conclusión de “echar balones fuera”. El alcalde de Cedeira aseguró que en el encuentro que mantuvieron representantes de los ayuntamientos y de las propias mariscadoras con la delegada territorial, Martina Aneiros; con la directora del Intecmar, Covadonga Salgado; con el presidente de Portos, José Antonio Álvarez, y con el director de Augas de Galicia, Roi Fernández, se habló de colaborar para ver cómo acabar con unos picos de contaminación que, tal y como se puso de manifiesto, no parecen tener un único foco.
La falta de saneamiento en los muelles y las escorrentías procedentes de granjas estuvieron entre las causas que se trataron en la reunión, “más relevantes que los dos puntos de la red de saneamiento municipal, pese a que la Xunta prefirió pasarlos por alto y apuntar únicamente a Cedeira”.
Así, Moreda Gil pidió “más seriedad para abordar este problema”, que ha provocado el cambio de clasificación microbiológica de los bancos marisqueros de Cedeira y Vilarrube. Ahora son zonas C, lo que supone un perjuicio muy importante para el sector marisquero, recordó el alcalde, que también aludió a la clasificación de “excelente” que alcanzaron las aguas del litoral de Cedeira en los últimos años, como consecuencia directa del enorme esfuerzo realizado por el ayuntamiento en la mejora del sistema de saneamiento y en la implantación de la red separativa.
Por su parte, el alcalde de Valdoviño, Alberto González, demanda de la Xunta un estudio en profundidad de la cuenca de los ríos Ferrerías y As Mestas, de modo que se realicen las analíticas pertinentes con las que descartar posibles afectaciones en el marisqueo derivadas de focos de contaminación en estas áreas. El regidor recordó que en el año 2019 se activó la alerta de contaminación por cianobacterias en el embalse de As Forcadas, que se nutre de Ferrerías, y que desde entonces los niveles de contaminación no hacen más que aumentar año tras año, obligando a la suspensión de actividades en el embalse e incluso el baño.
Además, As Mestas desemboca en el arenal de Vilarrube, zona de trabajo de las mariscadoras. Con el objeto de descartar una posible relación entre ambos episodios, se urge ese estudio analítico en profundidad por parte de la Administración autonómica, ya que cuenta con todos los medios y recursos, además de la competencia, para hacerlo.