El sindicato CIG valora de manera muy positivamente la sentencia emitida por el Juzgado del Social número 1 de Ferrol, por la que se declara nulo el despido “por lesión del derecho a la libertad sindical no respetada” de uno de sus delegados, en la que se obliga a pagar los salarios dejados de percibir y a la inmediata readmisión de uno de los delegados sindicales en la empresa Noa Madera Creativa, del grupo Malasa, asentada en el polígono industrial de Vilar do Colo, en Fene, que fue despedido en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectó a cerca de 70 trabajadores.
Marcos Sánchez, de la CIG-Construcción de Ferrol, considera que la empresa aprovechó el ERE, en contra del que siempre estuvo la central sindical nacionalista, para despedir a los delegados sindicales como “una forma de meter miedo y amedrentar a los compañeros”.
Por eso la federación valora muy positivamente esta readmisión, así como la de otro compañero de otro sindicato que también fue readmitido y espera que en el juicio que queda pendiente, para el mes de noviembre, “de otro delegado, se obtenga el mismo resultado”.
