La Confederación General del Trabajo (CGT) de Navantia Ferrol ha manifestado su descontento y preocupación por la implicación de la fragata Méndez Núñez como el buque de aprovisionamiento de combate Patiño, ambos construidos en sus astilleros, en operaciones militares que podrían estar apoyando al Estado de Israel en su ofensiva contra Palestina tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania.
“A pesar de las informaciones interesadas de la Armada Española dando a entender que los barcos navegan por el Mediterráneo por la guerra de Ucrania, esto no es así: están integrados en la flotilla que acompaña al mayor portaaviones de la armada estadounidense, el Gerald R. Ford, enviado en apoyo de Israel”, denuncian desde la CGT.
Así, la CGT rechaza que estas embarcaciones, que fueron construidas en los astilleros de Navantia Ferrol, puedan estar colaborando en un “genocidio”. La organización sindical, que se opone firmemente a estas acciones, propone una serie de medidas drásticas que incluyen la inmediata repatriación de los buques mencionados, la anulación de toda colaboración de Navantia con empresas israelíes y la ruptura de relaciones diplomáticas y comerciales con Israel.