La gestión del centro de atención a personas con discapacidad Souto de Leixa, titularidad de la Xunta de Galicia, situado en el Ayuntamiento de Ferrol, es motivo de polémica casi desde el momento mismo en que fue privatizada a favor de la empresa CLECE, del grupo ACS, a finales del año 2010 por un plazo inicial de tres años, y que ven prorrogándose sucesivamente desde aquel entonces. Tanto el comité de empresa como las familias de las personas residentes se quejan de que el estado de las instalaciones, las malas condiciones de trabajo, la sobrecarga provocada por la falta de personal o la falta de formación, lo que afecta a la calidad de la prestación del servicio.
Es por ello que el BNG acaba de registrar una proposición no de Ley para recuperar la gestión pública del centro. Según el diputado nacionalista Mon Fernández «las condiciones de vida de las personas residentes y su atención y seguimiento sanitaria son objeto de duras críticas por parte de los familiares, que se quejan de que pasan frío y hambre, de que duermen vestidos, de que llegan a los domicilios con ropa de otras personas residentes, de descontrol en la medicación, de reiterados incidentes con lesiones, y de las tremendas dificultades que la dirección del centro impone para el acceso a las instalaciones»
Además, Mon Fernández aseguró que «estas quejas son conocidas por la consellaría de Política Social, que sigue sin tomar medidas, tornándose en una especie de muro insuperable que está provocando un desgaste añadido a la salud de las familias que confiesan encontrarse en una situación límite, y que recuerdan tiempos mejores cuando la gestión era pública»
