El Ayuntamiento de Ferrol ha rendido un homenaje póstumo a Fernando Miramontes con un acto en Canido al que asistieron decenas de personas. En la antigua plaza da Auga, que pasa a llamarse plaza de Fernando Miramontes, se descubrió la una placa con el nombre del histórico político del Partido Comunista.
El alcalde, Ángel Mato, presidió una ceremonia en la que también intervinieron los exregidores Jorge Suárez y Manuel Couce y que cerró Dolores Miramontes, hija del homenajeado. Asimismo, asistió el exalcalde José Manuel Rey Varela. Poco antes, en el palacio municipal se descubrió el retrato de Fernando Miramontes , pintado por Andrés Gabarres, que pasará a la galería de alcaldes del Salón de Plenos, y que el vecindario pudo ver durante el acto en Canido.
Será así por el acuerdo plenario, aprobado por unanimidad, en el que se recoge esta honor para el teniente de alcalde que en más ocasiones ocupó la alcaldía de manera accidental. Mato ensalzó la figura “de un hombre que reunía el mejor de los valores de una generación a la que le debemos tanto” y que era “una grandísima persona”. Y sobre la colocación de su cuadro entre los de los alcaldes de la democracia, dijo que se trata “de una excepción que se hace para una persona excepcional”.
El portavoz de Ferrol en Común, el exalcalde Jorge Suárez, agradeció que el homenaje obedece a la unanimidad de los grupos políticos y recordó los momentos difíciles que Miramontes vivió durante el franquismo, “como muchos compañeros, por su militancia comunista”. Por eso, destacó que en democracia “trabajó por el acuerdo y por el bien de la ciudad”.
Couce se expresó en similares términos. “Dedicó su vida a servir a todos”, afirmó elexalcalde, quien añadió que Miramontes desarrolló el servicio público “con ilusión y entusiasmo” para resolver los problemas. El exregidor socialista, que compartió equipo de gobierno con Miramontes, lo calificó de “referencia de la izquierda en Galicia”.
Los tres tuvieron palabras para Fina, la compañera del homenajeado, de la que aseguraron que fue la figura más importante para su trayectoria vital. Concluyó el acto su hija Loli. Dijo que para la familia quedan, sobre todo, “los conceptos de justicia y honor” que defendió su padre, y finalizó con una frase que Miramontes repetía: “Se hay una tortilla, lo justo es repartirla entre todos”.
