Los sindicatos MAS y CIG han criticado a CCOO, acusándoles de «hacer el ridículo», tras denunciar que el presidente del comité de empresa, Juan Carlos Díaz (MAS), y el secretario, Marcelino Amado (CIG), se reunieron de forma discreta el pasado jueves con el presidente de la compañía naval.
Según el comunicado emitido, fue el propio presidente de Navantia quien contactó, a través de Recursos Humanos, al presidente del comité para concertar un encuentro meramente protocolario y sin agenda definida. En esta ocasión, comparecieron el presidente del comité y el secretario, «como siempre se hizo».
El breve encuentro, que «no llegó a 10 minutos», se centró en exigir al mandatario de Navantia que atendiera las demandas del personal, relacionadas con la formalización de futuros contratos, el impulso de un plan de empleo y la reactivación de la negociación del convenio colectivo.
En el comunicado, se subrayó: «no entendemos la indignación de algunos porque se asuma la responsabilidad de los puestos que cada uno ocupa. No tenemos nada que ocultar, ni nos escondemos de nadie». Además, se explicó que «no le dieron tiempo» a informar del suceso, ya que «eran conscientes» de que a las 11.00 horas debían comparecer en el juzgado, tras haber sido convocados como testigos por antiguos compañeros jubilados.
Asimismo, los sindicatos manifestaron: «Cuando ellos estaban protestando contra el presidente y el secretario del comité, ya estábamos con los abogados, esperando al juicio». Por su parte, señalaron que mientras tanto, una parte del comité, encabezada por CCOO, «se concentra delante de una puerta en una dirección vacía» para manifestarse contra una reunión que, según ellos, «no existía», ya que el presidente de Navantia se encontraba inspeccionando la fábrica y tanto el presidente del comité como el secretario estaban en el juzgado.
Finalmente, los sindicatos añadieron que «sería más sencillo» recibir una llamada telefónica para conocer la situación antes de «cometer un ridículo semejante», enfatizando: «El comité de empresa debe de estar a la altura y no tener comportamientos tan erráticos e infantiles».
