El alcalde de Ferrol, Ángel Mato, continúa su periplo por Madrid, donde está manteniendo varias reuniones de interés para la ciudad. Ayer se reunió con el presidente de Navantia, Ricardo Domínguez, con el fin de analizar los proyectos que tiene en marcha a empresa pública en Ferrol y las perspectivas de futuro de los astilleros de la ría. Entre otros asuntos, hablaron sobre la puesta en marcha de la fábrica de bloques, “prevista para fin de año o principios del próximo”, y para la que los Presupuestos del Estado del 2023 incluyen una partida de 56 millones de euros, una cifra que representa más de la mitad de la inversión total prevista.
También comentaron las posibilidades que se abren para el área de Reparaciones, que acaba de completar con gran éxito el mayor contrato de su historia, el de la extensión de la vida útil de la plataforma canadiense FPSO Terra Nova. Este trabajo para Suncor Energy alcanzó picos de actividad en los que participaron cerca de un millar de personas y su buen desarrollo sitúa al área de reparaciones en posición de competir por nuevos contratos dentro del sector del petróleo y el gas. “Este contrato abre un nicho de mercado muy importante y la previsión de conseguir otros similares”, remarcó el alcalde tras la reunión.
Del mismo modo, Mato y Domínguez hablaron sobre la incorporación de Navantia a los proyectos de hidrógeno verde, que a corto plazo va a afectar muy positivamente a otra de las instalaciones del astillero ferrolán, la de Turbinas. En ella se va a poner en marcha una línea de fabricación de electrolizadores “de la mano de compañías de referencia”. “Así, se pasa de fabricar pequeños componentes a disponer de muchas posibilidades en el campo del hidrógeno”, dijo el regidor, que también valoró, en este ámbito, “la apuesta de Navantia por la eólica marina a través de Seanergies, tomando un papel activo en el desarrollo de las renovables”.
“Situación histórica”
Por otra parte, analizaron la repercusión que la modernización de las F-100 va a tener sobre la actividad del astillero, una vez que el Ministerio de Defensa anunciara que ese programa se va a desarrollar en las instalaciones de Ferrol durante los próximos diez años. Así, a la construcción de las F-110, con un presupuesto de 4.300 millones de euros, se une ahora una inversión de 2.000 más para la renovación de las F-100, que nos Presupuestos del Estado del 2023 ya cuentan con una partida superior a los 100 millones. Esto, unido a los centros de excelencia previstos en Fene y en Ferrol, con sus correspondientes inversiones, supone que Navantia “va a vivir en los próximos años un desarrollo en cuanto a modernización y carga de trabajo desconocido antes. Es una situación histórica”, resumió Ángel Mato.
El regidor recordó que “eso va a arrastrar a la industria auxiliar y se va a notar en el empleo, pero hay que seguir dando pasos, y el propio presidente aseguró que hay diferentes proyectos en curso que aún pueden traer más buenas noticias para Ferrol y la comarca”. De hecho, hablaron de la modernización del astillero de Fene, que Mato calificó de “muy buena noticia y una muestra de la apuesta decidida de Navantia por ser un agente importante en la transformación energética en la que está inmersa Europa”. “Hace cuatro años solo había incertidumbres: faltaba carga de trabajo, los plazos de las fragatas F-110 se dilataban y muchas áreas del astillero carecían de visión de futuro. Ahora el compromiso del Gobierno con Navantia y lo de Navantia con Ferrol y la comarca es muy firme, como no lo era en décadas”, concluyó el alcalde tras la reunión.