Las investigaciones relacionadas con la brutal agresión sufrida por Valentín, un vecino de 58 años de Ferrol, en su propia casa durante la madrugada del pasado domingo, están en proceso. Por el momento, no se han producido detenciones. Aunque en un principio había dudas sobre si la cámara de seguridad del edificio estaba operativa en el momento del incidente, parece que ha habido suerte y las autoridades están analizando las imágenes para identificar a los responsables, con la ayuda de los testimonios de la víctima y de los vecinos.
Según relató el vecino de la calle Magdalena, aunque los atacantes podrían no ser originarios de Ferrol, no parecen ser extranjeros, como se especuló inicialmente. “Eso es falso, no son dominicanos”, ha dicho Valentín con contundencia, subrayando que “el corte de pelo de la chica no era de una dominicana”, desmintiendo así los rumores que vinculaban la agresión con una banda latina.
Las autoridades han descartado que se trate de personas de esta nacionalidad, pero el hecho de que se pueda tratar de individuos de fuera de Ferrol hace las labores de la Policía más complicadas, ya que este fin de semana la ciudad celebró sus fiestas y acogió a personas de todas partes de Galicia e incluso de España. “Esto se llena”, dice Valentín, quien espera que se identifique a los agresores para que “no se queden sin antecedentes y no se vuelvan más peligrosos”.
El grupo de jóvenes, irrumpió en el edificio después de que Valentín les pidiera desde su ventana que dejaran de hacer ruido y de molestar a los vecinos. Tras tirarle un vaso de agua, empezaron a golpear el portal dejando dos boquetes en la parte inferior y, posteriormente, subieron hasta el tercero, donde vive Valentín para emprenderla a palos con su puerta. Tras abrirles para que no se la tiraran abajo, comenzaron a agredirle violentamente, dejándole toda la cara magullada y “confundido”, además de necesitar una muleta para poder caminar.
La Policía, que mantiene contacto regular con Valentín, le ha asegurado que están haciendo todo lo posible para resolver el caso. “Los policías que me atendieron se preocuparon mucho y están intentando que se resuelva”, ha expresado Valentín. Si al final logran identificar a los culpables de la agresión, podrían imputarles cargos de al menos tres delitos graves, según el Código Penal: allanamiento de morada, daños a la propiedad y lesiones. Además de asumir los costos de las reparaciones materiales, así como los gastos de tratamiento médico e indemnizaciones para Valentín.