Los orígenes de la Semana Santa de Ferrol se remontan al siglo XVIII y desde 2014 está declarada de Interés Turístico Internacional. Sin embargo, esta tradicional celebración ha vivido en los últimos tres años situaciones muy distintas entre sí. Mientras que en 2019 las calles de Ferrol se llenaban de miles de turistas, en 2020 la ciudad cancelaba todos los eventos debido al confinamiento provocado por el COVID-19.
En plena tercera ola, se plantean los escenarios para 2021 pero César Carreño, presidente de la Junta General de Cofradías y Hermandades de la Semana Santa de Ferrol, ya adelanta que es muy complicado que veamos procesiones este año. Según Carreño, sobre los desfiles procesionales que cada año llenan las calles de Ferrol, “la intención es que se pudiera hacer, pero tal como está la situación me parece que no va a ser posible”.
¿Otras opciones?
Ante este escenario, las cofradías ya han comenzado a planear alternativas. Los actos estáticos, con control de aforo y al aire libre son sus principales apuestas. “Proponemos altares de culto, que sería poner en plazas las imágenes en sus tronos, tal y como salen en procesión, para que la gente pudiera acercarse”, explica Carreño.
Otra opción son visitas guiadas “a las sedes canónicas de las cofradías o en los museos, como el ferrolano de la Semana Santa”, explica el representante de las cofradías. Desde las organizaciones, también plantean hacer pasacalles con bandas o conciertos, pero siempre “siguiendo las pautas que nos marquen las autoridades”, puntualiza Carreño.
Según el organizador, todos los eventos cuentan ya con los protocolos sanitarios pertinentes y lo más importante “son flexibles. Es decir, podemos comenzar la Semana Santa con un plan y cambiar a otro tipo de eventos a mediados de semana”, explica Carreño sobre la organización.
Los riesgos que plantean las procesiones
Muchos vecinos de Ferrol se preguntan por qué las procesiones no serían seguras si son también al aire libre. Carreño explica que la acumulación de gente en las calles es el principal problema a nivel externo, “estamos hablando de 10.000 – 15.000 personas viendo la procesión”, puntualiza. Pero también trae problemas a nivel interno, “aunque los cofrades puedan mantener las distancias, el trono lo llevan 60 personas y es muy complicado mantener las distancias ahí”.
Carreño explica que la intención es intentar poder tener procesiones, sobre todo, dada la importancia de la celebración en la Ciudad. “La Xunta estimaba la repercusión de la Semana Santa en Ferrol en 45 millones de euros. Es una semana en la que vienen 300.000 personas, por lo que dejar Ferrol sin esta celebración y estos ingresos es complicado”, explicaba el representante de las cofradías.
Todo depende de la situación sanitaria
Según Carreño, no creen contar con una decisión firme hasta “15 días antes de la Semana Santa. Las cofradías seguimos trabajando, pero como esto cambia tan rápido…”, puntualizaba. En cualquier caso, Carreño insistía en que necesitan tiempo y que la situación debe mejorar, “si la Semana Santa fuera el martes que viene, imposible, pero ahora habrá que esperar”.
Está previsto que mañana se reúnan representantes de la Junta General de Cofradías y Hermandades con la consellería de Sanidade. Carreño espera que en esta reunión se puedan establecer las bases para comenzar a diseñar el plan final de la Semana Santa 2021.