El alcalde de Ferrol, Ángel Mato, firmó ayer un decreto por lo que los negocios que no puedan desarrollar su actividad debido a las medidas de cierre temporal de actividades establecidas por la Xunta de Galicia el pasado 26 de enero (por el período 27 de enero-17 de febrero) pagarán por el recibo del agua y de la basura el importe mínimo, correspondiente a la tarifa “sin actividad” de abastecimiento de agua, saneamiento y recogida de residuos sólidos urbanos.
Para solicitar este cambio de tarifa, los afectados dispondrán de un plazo que se abrirá el próximo lunes, 8 de febrero, y finalizará el viernes 19. Deberán hacerlo ante Emafesa (plaza de la Ilustración, 5, bajo), presencialmente o por medios telemáticos (a través de la dirección de correo electrónico info@emafesa.com o los números de teléfono 981 369 012 y 981 369 015), acreditando mediante el epígrafe el IAE y otros documentos que lo avalen, el cierre efectivo de los negocios.
Esta es la tercera vez que el Ayuntamiento articula esta medida desde el inicio de la pandemia, después de ponerla en marcha en abril y en noviembre del 2020. Igual que en esta ocasión, en las dos anteriores se debió a cierres forzosos decididos por las autoridades sanitarias. En el correspondiente al confinamiento de marzo y abril del pasado año, cuando afectó a la gran mayoría de los locales comerciales, se acogieron a la tarifa “sin actividad” 823 establecimientos, que ahorraron un total de 122.764 euros en la factura bimestral, con una media próxima a los 150 euros por negocio.
Una medida complementaria al Plan de Mantenimiento e Impulso de la Actividad Económica (PAME3), abierto el pasado 28 de año y que destinará 1.800.000 euros en ayudas directas a autónomos y pymes de Ferrol afectados por la crisis derivada de la pandemia sanitaria del covid. El plazo de solicitud de estas ayudas finalizará el próximo 24 de febrero.
Las subvenciones podrán destinarse, por una parte, al abono de cuotas de la seguridad social o del régimen especial de trabajadores autónomos, hasta un límite de 2.000 euros. Por otra, al pago de alquileres de locales y cuotas de préstamos hipotecarios, con un máximo de 1.500 euros. De este modo, el importe máximo de subvención por beneficiario sumará 3.500 euros. En cuanto a la inclusión de las cuotas de hipotecas en los gastos subvencionables, la concejala destacó que con ella se trata de “dar respuesta a toda la casuística de la situación de los establecimientos”, ya que se une a la ayuda por alquiler y a las bonificaciones en el IBI ya aprobadas.