El Concello de Neda ha retirado esta mañana la cruz de los caídos de los jardines de O Coto, instalada en 1939, en cumplimiento de la Ley de Memoria Democrática. La decisión se ha tomado tras consultar a la principal asociación memorialista de Ferrolterra y disponer de un informe histórico que acredita su carácter como monumento de exaltación de la sublevación militar y la dictadura franquista.
Las labores para desmontar la cruz y la lápida, que estuvieron presentes en ese lugar durante 85 años, comenzaron a primera hora y se completaron en poco más de media hora. Esta medida se planteó por última vez en el pleno de marzo, cuando se presentó una moción nacionalista, pero el gobierno local decidió posponerla para constituir el Consello Sectorial de Memoria Democrática, una propuesta de la Asociación Cultural Memoria Histórica Democrática.
Manuel Pita, presidente de la asociación, ha afirmado que “se ha quitado el tapón que nos impedía seguir avanzando”. Ha explicado que, aunque el Consello sectorial y su reglamento ya estaban trabajados y acordados, la presencia de la cruz impedía avanzar en su aprobación. “Era imposible aprobar un Consejo sectorial de la memoria teniendo eso ahí”, afirmó, añadiendo que la ley es clara al respecto: “Lo que dice la ley de memoria democrática es que ese tipo de simbología no puede estar”.
El informe, elaborado por los historiadores Xosé Manuel Suárez, Bernardo Maiz y Eliseo Fernández, subraya que la cruz formaba parte de las “inauguracións de milleiros de placas e cruces que na inmediata posguerra levaron a cabo as autoridades do réxime franquista en homenaxe ás vítimas da guerra do bando sublevado”. Los historiadores concluyeron que este elemento “é contrario á memoria democrática e debe ser retirado do seu emprazamento, de acordo coa lei”.