El centro de salud de Caranza cuenta desde esta mañana con una carpa instalada en su parte trasera, para acoger y resguardar la realización de pruebas COVID-19. La estructura ha sido habilitada por el concello de Ferrol en la calle Cuco Ruíz de Cortázar y se suma a la carpa colocada a principios de mes en la parte delantera del ambulatorio Fontenla Maristany, en la plaza de España.
En referencia a esta nueva instalación, el concejal de Seguridad y Sanidad, Germán Costoya, subrayó esta mañana que “el Ayuntamiento está poniendo todos sus medios con el fin claro de proteger a nuestros vecinos, tal y como venimos haciendo desde el inicio de la pandemia”, el pasado mes de marzo.
La carpa, que ya está operativa en Caranza, consta de 4,5 metros por 3 metros, lo que configura un espacio total de 13,5 metros cuadrados. El edil aprovechó para llamar de nuevo a la “responsabilidad individual” como herramienta para “lograr reducir el número de contagios en nuestra ciudad”.