El Ayuntamiento de Valdoviño puso en marcha este pasado fin de semana medidas de ahorro de agua ante la situación de sequía prolongada, entre ellas la interrupción del suministro de agua en fuentes y en duchas de las playas. Y ha sido precisamente en varias de ellas situadas en los arenales donde se han detectado acciones vandálicas. En concreto, han sido manipuladas las llaves de paso de las instalaciones de Villarrube, en A Frouxeira, y en Outeiro, en Lago.
A mayores, también hay que sumar, según ha denunciado el Ayuntamiento a través de un comunicado, daños en las columnas de duchas de la playa de Mourillá, con las consiguientes fugas de líquido. Es por ello que el Ayuntamiento que preside el socialista Alberto González hace un «llamamiento a la ciudadanía para que colabore en el cuidado de estos equipamientos y ayude en la identificación de los autores de los daños».
Además, pide «respeto para unas decisiones municipales que solo tratan de concienciar sobre la necesidad de hacer un consumo responsable de agua» y que busca «atajar el importante gasto que se produce en los arenales locales, especialmente en los más concurridos, ante un posible episodio futuro de escasez». Por último, recuerda que las restricciones preventivas atienden a las recomendaciones dictadas por la Xunta y adelantan que, en caso de que las acciones vandálicas continúen, se verán obligados a «cerrar también las casetas de los servicios».
