El surf en Valdoviño más allá del verano

El municipio se consolida como destino internacional de este deporte gracias al Pantín Classic, el Océano Surf Museo y sus escuelas, que impulsan el turismo y la economía local durante todo el año

Una de las clases impartidas por Marcos Pita | @PANTINSURFCAMP_

La costa de Valdoviño, bañada por su oleaje atlántico y rodeada de un espacio protegido por la Red Natura 2000, se ha afianzado como un destino clave para la práctica del surf en Galicia. Con sus 17 playas y su reconocida tradición surfera, este deporte se ha convertido en un motor de crecimiento continuo, que ha logrado desestacionalizar el turismo y atraer visitantes incluso fuera de la temporada estival, y es que según el alcalde Alberto González, “el polígono industrial de Valdoviño es su territorio, su paisaje y las playas de su costa”.

Con la playa de Pantín, como escenario del Pantín Classic desde 1989, este concello ha logrado captar la atención internacional de los amantes de este deporte. Pero la visión del concello no se limita a este campeonato anual. Valdoviño ha apostado por la creación de infraestructuras que aseguren la práctica del surf durante todo el año, como la mejora del estacionamiento de Pantín, pensado para facilitar la organización de eventos no solo en verano, sino en cualquier estación. A ello se suma la inclusión del municipio en la Red de Pueblos del Surf, una iniciativa del Ministerio de Industria que asegura el apoyo financiero para el desarrollo turístico en torno a este deporte.

Además, el gobierno local ha impulsado la creación del Océano Surf Museo, el primer museo dedicado al surf en España. Inaugurado en 2017 en la Casa da Cultura, este museo ofrece un recorrido por la historia de este deporte con actividades complementarias como ciclos de cine, charlas y exposiciones temporales. Valdoviño refuerza con este espacio su posición como un referente del surf en Galicia, mientras sigue fomentando el empleo y el crecimiento económico local ligado al turismo deportivo.

 

La playa de Pantín durante el Pantín Classic 2024 | ENFOQUES

Y es que durante los últimos años, se ha registrado un crecimiento en la oferta de alojamientos, con la apertura de nuevos hoteles, hostales y casas rurales. Además, se están desarrollando iniciativas de turismo sostenible, con proyectos como Silent Island, un complejo de cabañas rurales orientado a un turismo de naturaleza y descanso.

Por otro lado, las escuelas residentes de surf como RSM, Santiago de Pantín Surf School, Alawa Surf School, Camino Surf y Friends & Family Surf School ofrecen formación incluso en pleno invierno, lo que impulsa la llegada de deportistas y turistas que traen beneficios a la economía local, especialmente a sectores como la hostelería y el comercio.

Clases de surf en invierno

Marcos Pita, Director técnico y socio fundador del proyecto Pantín Surf Camp, que nació en 2008, cuenta que el verano es más variable en cuanto a horarios. “En invierno, por el contrario, hay que planificar en función del parte de olas, porque hay semanas de temporal terrible, incluso a veces meses completos en los que solo se puede surfear un par de días”.

La escuela RSM lleva más de siete años enseñando surf por las playas de Ferrolterra y ha centrado su enfoque en llevar a los surfistas a su máximo nivel, diferenciándose de otras más enfocadas en el ocio veraniego. “Nuestro objetivo es llevar al surfista a su máximo nivel”, explica Rubén Sanmartín, socio fundador. “Esto atrae a surfistas no solo locales, sino también de otras regiones de España y del extranjero”.

“En invierno, cuando las condiciones meteorológicas son totalmente imposibles, la escuela dispone de la Green Surf Huse donde dispone de gimnasio y una rampa de surfskate, lo que permite a los alumnos seguir entrenando cuando las condiciones en el mar no son favorables”. Explica que debido a la gran afluencia de surfistas aficionados, la práctica del surf se ha vuelto más peligrosa, por eso ponen en práctica el uso del casco para los más pequeños.

“Nosotros trabajamos bien, y eso se nota porque la gente sigue viniendo”, afirma. “Tenemos una campeona gallega, sub-16, y la han llamado para un campeonato internacional y la niña lleva dos años surfeando”. Aunque esperan que llegue esa “meseta”, de momento el número de alumnos siguen subiendo. “El boca a boca es lo que está funcionando”.

Y de ese boca a boca todo el municipio se beneficia: “Mi escuela repercute en el restaurante de al lado, es común ver a 15 o 16 surfistas comiendo los fines de semana”, comenta. Esto muestra que la actividad continua de estas escuelas también contribuye a desestacionalizar el turismo, haciendo que Valdoviño se mantenga como un destino atractivo durante todo el año.

Además, agradece la colaboración con el Concello de Valdoviño: “Siempre que necesitamos cualquier tipo de ayuda, colaboran”, comenta. En ese sentido, la escuela ha recibido el apoyo del gobierno local en la primera edición del Campeonato Chiquipros RSM, una prueba del circuito gallego Kids y Junior, que puso en marcha Rubén este verano.

 

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