La Xunta de Galicia ha anunciado la puesta en marcha del «Bono Peixe», una ayuda directa de 50 euros destinada a fomentar el consumo de pescado fresco en la comunidad. Esta medida, que estará disponible en las próximas semanas —antes del inicio del verano—, busca revertir la caída del consumo de pescado en los hogares gallegos y apoyar al pequeño comercio del sector.
El conselleiro do Mar, Alfonso Villares, ha presentado la iniciativa durante una visita al Mercado de Abastos de Santiago, donde ha subrayado la importancia de recuperar los buenos hábitos alimenticios, especialmente entre la población infantil. “El pescado es una proteína muy saludable y debemos hacer todo lo posible para que vuelva a tener un papel central en nuestra dieta”, destacó.
Cinco euros semanales durante diez semanas
Con una inversión de 2,5 millones de euros, el «Bono Peixe» beneficiará a unas 50.000 personas. La ayuda se podrá utilizar exclusivamente en la compra de pescado fresco en establecimientos adheridos, y su uso estará limitado a un máximo de cinco euros semanales durante un periodo de diez semanas. Según explicó Villares, este diseño busca fomentar un consumo sostenido en el tiempo, evitando que el importe se gaste de una sola vez y garantizando así un flujo regular de clientes en las pescaderías locales.
La gestión y distribución del bono correrá a cargo de una entidad colaboradora, y se prevé que los descuentos supongan alrededor del 25% del coste habitual del producto, teniendo en cuenta su carácter perecedero. Además, el sistema permitirá acumular el saldo no utilizado de una semana a la siguiente, dando mayor flexibilidad a los consumidores.
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ya había avanzado esta medida durante su intervención en el último debate sobre el estado de la autonomía, calificándola como un estímulo para que la ciudadanía “recupere el hábito de consumir pescado”, una tradición que en Galicia aún resiste mejor que en otras regiones, pero que también muestra signos de debilitamiento.

Y es que el contexto no es alentador: el consumo de pescado en España ha caído drásticamente en la última década. Mientras que en 2014 cada persona consumía una media de 27 kilos al año, en la actualidad la cifra ha descendido a poco más de 18 kilos. Galicia, aunque por encima de la media nacional con unos 25 kilos per cápita, también ha notado el descenso, lo que preocupa especialmente a un sector que genera más de 50.000 empleos en la comunidad.
El «Bono Peixe» ha sido recibido con optimismo por comerciantes y pescaderos, que ven en esta ayuda una oportunidad para revitalizar sus negocios en un momento especialmente difícil. En todo caso, reclaman también la bajada del IVA o campañas para el fomento de su consumo ante el temor de que el bono incremente las ventas pero no fidelice nuevos clientes.