La Guardia Civil, a través del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de Pobra de Trives, ha tomado declaración a un hombre de más de 80 años, investigado como presunto responsable de un incendio forestal por imprudencia.
El siniestro se produjo el pasado lunes 8 de septiembre en la localidad de Casteloais, en el municipio de Chandrexa de Queixa, uno de los más castigados por las llamas este verano. El fuego arrasó unas 18,5 hectáreas de monte bajo y arbolado.
Según las pesquisas de los agentes, el origen del incendio estaría en una quema no autorizada realizada en una finca propiedad del investigado. Para sofocar las llamas fue necesaria una amplia operación en la que participaron cuatro helicópteros, cuatro avionetas, tres motobombas, diez brigadas de extinción y efectivos de la Guardia Civil, de acuerdo con la información facilitada por la Comandancia de Ourense.